Brasil, en general, no la pasa bien con el Coronavirus. Una pandemia que ha afectado sobre manera a los clubes de ese país. Ayer, el cuadro de Gremio sumó otros dos casos positivos de la enfermedad, lo que obligó a las autoridades a mover el partido que se disputaba este miércoles 7 ante Independiente del Valle, en Quito, por la tercera fase de la Copa Libertadores, la última antes de los grupos.
Dos jugadores del cuadro gaúcho, Paulo Victor e Vaderson, además de un miembro de la delegación del equipo brasileño dieron en su arribo al Ecuador para medirse al cuadro que eliminó a Unión Española. Las tres personas fueron aisladas en el hotel de concentración, a la espera de una segunda prueba, que confirmó el positivo.
“Por normativas epidemiológicas que tenemos en el país, se realizaron las pruebas de antígenos que nos reportaron dos deportistas positivos y por eso les aislamos de inmediato. Las pruebas PCR confirmaron los positivos. Nuestra recomendación, como Ministerio de Salud, es que no se realice el evento deportivo”, informó Maribel Cruz, viceministra del Ministerio de Salud del país del Guayas, quien adelantó que la variante brasileña.
Cambio de sede
Apenas se conoció la noticia, la Confederación Sudamericana de Fútbol anunció nueva fecha y lugar para el duelo, el que se disputará el viernes en Asunción, en el estadio Defensores del Chaco.
El equipo de César Pinares ha sido uno de los tantos equipos brasileños afectados por la pandemia. Incluso su técnico, Renato Gaúcho, fue diagnosticado la semana pasada con la enfermedad, situación por la que fue aislado y no pudo viajar a Ecuador.
Pese a los problemas, el sitio Globoesporte anunció una posible formación para el duelo ante el equipo de Sangolquí, el mismo que jugó ante Inter, donde el ex volante de la UC estará entre los titulares. Así, el once sería el siguiente: Brenno; Victor Ferraz, Ruan, Rodrigues y Diogo Barbosa; Lucas Silva (Darlan) y Matheus Henrique; Alisson, Pinares y Ferreira; Diego Souza.