El Manchester City llegaba a su duelo con el Leipzig, por la Champions League, buscando asegurar el primer lugar del grupo G. Por lo mismo, el cuadro inglés salió a buscar el gol desde el primer minuto, mientras los alemanes intentaban controlar su ímpetu con una línea de cinco en el fondo y ubicando a todos sus hombres en campo propio.
Sin embargo, la visita no renunciaba al ataque y en el minuto 7 avisó a través de un contragolpe rápido de Löis Openda. El juego de posesión de los locales calmó las cosas y parecía que la oncena de Pep Guardiola en cualquier momento abría el marcador.
No obstante, la sorpresa se instalaría en el Etihad Stadium, cuando el portero Janis Blaswich lanzó un pase largo para que corriera Openda y, tras la débil marca de Manuel Akanji, marcara la apertura de la cuenta.
Era el 0-1 para la visita y una verdadera tragedia para el portero Stefan Ortega, quien debutaba en esta edición del torneo continental de clubes y ni siquiera había contenido un solo disparo en los 12 minutos jugados. Pero el español no sería el único impactado por el tanto foráneo, ya que todos sus compañeros pasaron por un momento de desconcierto.
De hecho, el reloj tuvo que marcar media hora de juego para que recién el elenco celeste creara una chance de gol que entusiasmara a su fanaticada: Rico Lewis realizó una diagonal de izquierda a derecha y cuando todos esperaban el empate, su tiro se fue por sobre el travesaño.
Error que les pasó la cuenta, pues al instante vino el segundo de Openda. El delantero belga otra vez se sacó fácilmente a su marcador. Su víctima fue Rúben Dias. El atacante encaró y cuando Joško Gvardiol intentó quitarle el balón, enganchó y disparó al primer palo de Ortega para decretar el segundo.
El descanso llegó en el momento justo, pues Erling Haaland se perdió un gol de los que siempre convierte y Dias debió irse expulsado, cuando cortó con falta otro contragolpe de los dirigidos por Marco Rose (era la segunda amarilla). Por lo mismo, el portugués salió reemplazado en el descanso por Nathan Aké y fue el primer acierto de Guardiola, pues el neerlandés logró controlar a Openda. ¿El segundo? El ingreso de Jeremy Doku y Julián Álvarez (54′).
Los Citizens mejoraron de inmediato y lo reflejaron con el descuento del noruego, tras pase de Phil Foden (54′). Lo que vino después era predecible. Más aún cuando Rose sacó a Openda (entró Benjamin Sesko a los 59′), porque el City se fue con todo en búsqueda del empate y lo consiguió tras un remate de Foden, desde el centro del área, tras una gran habilitación de Gvardiol (70′).
Luego, el propio volante inglés hizo una gran jugada por la derecha y le dejó la pelota servida a la Araña para dar vuelta el marcador (86′) y quedarse con el ansiado primer puesto del grupo.
Es que ya nadie podrá alcanzar a los ciudadanos en el apartado, porque suman 15 puntos y los alemanes se quedan con nueve, a falta de una fecha. En ella, el City visitará a Estrella Roja (va último con un punto) y el Leipzig recibirá a Young Boys (tercero con cuatro positivos).
Además, los ingleses alcanzaron un récord de 18 partidos sin conocer de derrotas en la Champions (13 ganados y 5 empates) y extienden a 29 su invicto como local. Su última derrota fue en septiembre de 2016, cuando perdieron con el Lyon.