Un sistema inédito para determinar al campeón del PGA Tour 2018-2019 es el que implementó el circuito para la edición del Tour Championship que parte este jueves en East Lake, Georgia.
En un inicio, ganaba el circuito quien finalizara el año con más puntos; luego, se estableció que se declarara ganador de los premios al vencedor del torneo final. Pero para esta temporada hubo una innovación importante.
El campeonato está reservado para los 30 mejores jugadores del año (por eso no está Joaquín Niemann, 67º del escalafón), los que no partirán el certamen desde cero, como de costumbre, sino con un score preestablecido de acuerdo a su posición en el ranking. La idea es darles ventaja a los mejores en el tablero antes de empezar a jugar.
De esta manera, el líder del año, el local Justin Thomas, iniciará el campeonato con 10 golpes bajo el par de "regalo", seguido por Patrick Cantlay, con -8, y Brooks Koepka, con -7. Más atrás estarán Patrick Reed, con -6; el norirlandés Rory McIlroy, con -5.
En tanto, cuatro bajo el par anotarán Rahm, Kuchar, Schauffele, Simpson y Ancer; -3 será el score inicial de Woodland, Finau, Scott, Dustin Johnson y Matsuyama; -2 tendrán Casey, Rose, Snedeker, Fowler y Kisner, mientras que uno menos sumarán Leishman, Fleetwood, Conners, Im y Reavie. Sin números partirán DeChambeau, Oosthuizen, Howell III, Glover y Kokrak.
"En cuanto el Tour Championship comience, cualquier fan, haya seguido o no los torneos durante el año, sabrá qué está pasando", declara el comisionado del PGA Tour, Jay Monahan. "Lo mismo los jugadores", agrega.
El campeón del torneo -y de la temporada- se llevará 15 millones de dólares como premios. El segundo, cinco millones. Incluso el octavo puesto obtiene una bolsa mayor a un millón de dólares. El Tour Championship tiene la cifra récord de 70 millones de dólares a repartir.