Matías Campos López habla como jugador de Universidad de Chile. Y lo hace con el entusiasmo lógico de quien da el paso más importante de su carrera, aunque también con la responsabilidad que implica. "Es un desafío muy grande. Sé que hay presiones externas, pero es una buena decisión y espero que pueda rendir como quiero. Mi carrera ha sido, como se dice, el camino largo. A mis 27 años, es una buena edad para estar en un equipo grande. Soy un agradecido de la vida y de Dios por darme esta oportunidad", declara al sitio oficial del club.
Luego, deja claro que su vínculo emocional con los azules es largo. "Siempre me gustó la U. Estuve en la escuela de fútbol. Mi padre me llevaba siempre. Siempre quise jugar en la U. La barra es muy grande y es siempre fiel", sostiene.
Y compromete una entrega total para ayudar al equipo de Frank Kudelka. "Como delantero, visualizar donde marcar, asociarme bien con mis compañeros. Y tratar de dar el 100 por ciento en cada pelota. Eso es lo que venía haciendo antes y espero que este 2019 siga siendo así. Espero demostrar que estoy capacitado para estar en Universidad de Chile, con humildad. Y dar el 100 por ciento, que es lo importante para un jugador en un equipo grande", concluye.