Una noche especial vivió Matías Zaldivia con la Selección. Probablemente algo que no imaginó hace seis meses, cuando se convirtió sorpresivamente en refuerzo de Universidad de Chile. El defensa argentino nacionalizado chileno había sido desechado por Colo Colo, el equipo donde ganó ocho títulos. Sus últimos tiempos en el Cacique estuvieron plagados de lesiones graves y conflictos con la dirigencia, hechos que le terminaron pasando la cuenta.
Sin embargo, a pesar de la resistencia inicial que generó su llegada en los hinchas de la U, el zaguero de 32 años no solo se ganó la titularidad en el conjunto azul, sino que logró llegar por primera vez en su carrera a la Roja.
El exjugador de Chacarita Juniors y Arsenal de Sarandí se ganó la oportunidad en los microciclos de Eduardo Berizzo, dejando una excelente impresión en el técnico de la Selección, quien no solo lo confirmó en la nómina para los amistosos ante Cuba, República Dominicana y Bolivia, sino que también le dio la titularidad en el partido jugado en el estadio Ester Roa Rebolledo de Concepción.
Con las manos atrás, el oriundo de San Isidro cantó el himno nacional con bastante entusiasmo. Ya, en el partido conformó una sólida dupla con Rodrigo Echeverría, quien anotó el segundo tanto de cabeza. Atento en los cruces y con voz de mando en la zaga, no tuvo mayores inconvenientes ante el débil ataque cubano.
Campos y Altamirano
Otro de los debutantes fue Cristóbal Campos, compañero de Zaldivia en Universidad de Chile. El meta ya había sido convocado con anterioridad por Berizzo, pero el golero de 23 años no había tenido la oportunidad de estrenarse y menos entre los estelares. Tuvo muy poco trabajo en la fría noche de la Octava Región.
Para Javier Altamirano, de gran campaña en Huachipato, también fue un partido especial. Debutó en el Equipo de Todos y ante los caribeños mostró cosas interesantes, con muy buena movilidad y tuvo un par de remates al arco después de muy buenas jugadas. Fue reemplazado a los 72′ por Lucas Assadi, dejando una buena impresión. Otra alternativa más en la búsqueda del recambio de la Roja.
En general, el discreto nivel de Cuba permitió el lucimiento de la mayor parte del equipo, y también ayudó que los debutantes se desenvolvieran con bastante confianza.