Solo nueve minutos se alcanzaron a jugar en el Gimnasia versus Boca Juniors cuando el caos se apoderó del Estadio Juan Carmelo Zerillo. Gases lacrimógenos lanzados por la policía a las afueras del recinto terminaron llegando a la cancha y afectaron a todos los presentes.
Las imágenes dentro del recinto impactaron al planeta fútbol, ya rápidamente los hinchas, jugadores, cuerpos técnicos y trabajadores del estadio comenzaron a verse afectados. Incluso una nube de gas lacrimógeno se posó sobre la cancha de Gimnasia atacando a los miles de asistentes al encuentro.
La situación se produjo porque en esos momentos en las afueras del Juan Carmelo Zerillo había enfrentamientos entre la policía y fanáticos que no pudieron ingresar a ver el encuentro. Varios registros muestran a los uniformados lanzando bombas lacrimógenas y disparando balas de goma a grupos de hinchas que merodeaban el estadio. También hay vídeos de personas a las que se les negaba la entrada pese a tener ticket en mano.
En el interior la situación no era menos traumática, ya que a los pocos minutos los jugadores tuvieron que abandonar la cancha y los hinchas ingresar al campo para tomar aire, porque entre la multitud era imposible respirar. Miles de seguidores terminaron dentro del césped para ser atendidos.
Finalmente, la Asociación de Fútbol de Argentina informó de la suspensión del encuentro. “El árbitro Hernán Mastrángelo suspendió por falta de garantías el partido entre Gimnasia y Boca Juniors por la fecha 23 del Torneo Binance. El encuentro estaba 0-0 en 9 minutos del primer tiempo”, publicaron en sus redes.