Quedan nueve fechas para el final del Torneo Nacional y, con el campeón prácticamente definido, las miradas se centrarán en la brega de algunos por salvarse del descenso. En ese lote de equipos está la U. Los de Hernán Caputto están fuera de la zona roja, sin embargo son uno de los elencos más irregulares de la competencia. Y como han sido incapaces de levantarse durante todo el año, el cierre del certamen se anticipa de terror para los azules.

Hoy, el equipo laico suma 21 puntos y está apenas dos por delante de la Universidad de Concepción, colista del torneo. En lo que va del año,  los universitarios registran un pobre 38,1% de rendimiento, merced a seis triunfos, 14 empates y ocho derrotas, contabilizando todas las competencias. Los números reflejan la crisis. En el campeonato nacional se agudiza el tema porque en 21 jornadas apenas ganó tres encuentros.

Los universitarios han tenido tres cuerpos técnicos este 2019. El argentino Frank Kudelka inició la campaña y se fue tras seis partidos. Alcanzó a cosechar un 27,8% de rendimiento y es, por tanto, la peor de las tres jefaturas técnicas del club durante el curso. Luego, llegó el uruguayo Alfredo Arias, quien tampoco pudo hacer despegar a la escuadra y se marchó después de 16 encuentros dirigidos, con un 41,7% de rendimiento. Sin ser capaz de impregnar su idea de juego al equipo.

Tras el adiós del charrúa, Caputto surgió como el salvador. Asumió como interino y en el camino convenció a la dirigencia de asegurarlo al menos hasta diciembre. La cúpula directiva dijo que vio mejoras, pero ahora todo eso parece un espejismo. En el inicio, el elenco dejó mejores sensaciones, pero los números del otrora arquero, de hecho, son peores que los de Arias (38,9% de rendimiento en seis compromisos). El actual cuerpo técnico totaliza cuatro empates, una derrota y apenas un triunfo.

Ninguno de los tres adiestradores que han conducido los destinos de la tienda estudiantil logra superar el 42% de rendimiento. Números pobres para una campaña pobre. La U sigue sin encontrar respuestas y la amenaza del descenso, lejos de disiparse, se torna cada semana más concreta. El tiempo apremia y no hay margen de error.

Por si fuera poco, los desafíos venideros generan tensión en el Centro Deportivo Azul. Palestino en el Nacional, Colo Colo en el Monumental (con toda la carga psicológica que genera esa situación en la U), e Iquique (rival directo por la salvación), son los próximos tres duelos del club universitario. Y será al todo o nada. Para alcanzar un despegue a tiempo que evite la catástrofe. O para hundirse definitivamente. La U tiene nueve partidos para salvar un 2019 para olvidar.