Aún no es oficializado, pero Hernán Caputto, el nuevo capo de las divisiones inferiores de la U, ya está instalado en el Centro Deportivo Azul desde el lunes de la semana pasada. Ese fue su primer día de trabajo luego de renunciar abruptamente a la Sub 17 de Chile y dejarla sin técnico a cuatro meses del Mundial.
Al día siguiente, el 2 de julio, el ex arquero fue presentado a todos los funcionarios del búnker estudiantil. En la improvisada ceremonia no estuvo solo, puesto que ese día Azul Azul también oficializó al resto de los trabajadores a Felipe de Pablo como nuevo gerente general. La nueva etapa azul, entonces, estaba en marcha tras el cambio de directorio de abril pasado. Eran sus cambios más visibles dentro de muchos que se están viviendo en La Cisterna.
La concesionaria ha cesado el contrato de varios de sus trabajadores, tanto en labores administrativas como deportivas. Así Azul Azul puso fin a los vínculos con Vladimir Bigorra, Juan González, Felipe Reyes, Pablo Ortiz y Eduardo Zurita, entre muchos otros. El área de logística y coordinación también se vio afectada.
En la cúpula estudiantil se apresuran en advertir que los cambios no tienen que ver con decisiones de Caputto. Que se venían evaluando esos nombres antes de su llegada.
Los más chicos
Hoy, de hecho, la sub 14, sub 13, sub 12 y sub 11 del club del Romántico Viajero están sin entrenador. Los que lleguen serán justamente una de las primeras decisiones de Caputto, quien dejó en serios problemas al directorio de la ANFP.
Pasa que hoy, a tres meses y 17 días del Mundial, aún no hay un técnico asignado al equipo. Recién mañana habrá una reunión en Quilín para esclarecer la situación, y aunque se prefiere un técnico extranjero, lo cierto es que hay chilenos en carpeta. Uno de ellos es Nicolás Córdova, aclamado por parte de la mesa, y otro Leonardo Véliz, quien se ofreció. Hay otros que postulan a Cristián Leiva, hoy a cargo de la sub 15 chilena.