Hubo llanto, desesperación e impotencia. Los casi 30 mil hinchas que llegaron ayer al Ester Roa iban dispuestos a vivir una fiesta, pero recién pudieron disfrutar al final. El triunfo 3-2 de Deportes Concepción sobre Limache significó más que tres puntos y un ascenso. Fue un desahogo total y una revancha sobre quienes desafiliaron al club el 26 de abril de 2016 y lo tildaron de inviable.
El camarín visitante se motivó con el festivo ambiente que había en Concepción e incluso con las declaraciones de directivos lilas, quienes hablaban de que con la recaudación ya tenían para pagar la millonaria cuota de incorporación a Segunda División. Así, Limache dio el golpe dos veces y solo estuvo en desventaja los últimos 15'. Primero fue Daniel Castro quien aprovechó los nervios e imprecisiones de la defensa lila al 25'. Más tarde, al 57', Luis Felipe Pinilla puso el parcial 1-2 mediante un penal que parecía derrumbar la feliz historia morada.
El 1-1 de Matt Lagos antes del descanso parecía ser el impacto sicológico necesario para dar vuelta el partido, pero Concepción no mostró buen fútbol. Los lilas ascendieron con fuerza, garra y corazón, curiosamente el mismo nombre que tenía la concesionaria que provocó el descalabro. En desventaja, a los morados se les vino el mundo encima, mientras los 500 hinchas de Limache disfrutaban su propia fiesta. Y era en paz, pese a que no hubo carabineros y la seguridad estuvo a cargo de 83 guardias.
Un tiro al arco, que fue una mezcla entre frustración por el 1-2 parcial y ganas de revertir la historia, terminó desviándose en un defensa visitante y significó el empate. El Ester Roa despertó y el DT Esteban González hizo ingresar a Ignacio Sepúlveda. El delantero tuvo poca continuidad durante la temporada y lo pasó mal, pero ayer entró a la historia. No llevaba ni 20 segundos y la primera pelota que tocó fue gol. "Fue el sueño del pibe. Nunca imaginé algo así", dijo el héroe lila.
Pitazo final, festival de fuegos artificiales y masiva invasión a la cancha. Los mismos que lloraron arrodillados en la plaza de la Independencia hace tres años, ayer celebraron su propio ascenso. Ellos levantaron al club y ya piensan en lo que viene. "Hicimos justicia. A este club, con todos los castigos, se lo robaron en diez años. Todavía quedan juicios pendientes, pero al fin recuperamos en cancha lo que perdimos. Con dolor y tristeza nos levantamos y hoy somos un club que tiene sus cuentas ordenadas y las arcas gorditas para pagar la boleta de garantía", aseguró feliz y emocionado el presidente Víctor Tornería, la cara visible de un club que demostró que es viable y está más vigente que nunca.
Sube Rodelindo Román
Ayer, Rodelindo Román, el equipo de Arturo Vidal, subió a Tercera A. Empató 3-3 con Ranco, certificando su llegada a la cuarta categoría del fútbol chileno. En el global, vencieron 6-4. Luego de dos años, el plantel de Rodolfo Madrid se establece en la división mayor de la ANFA, junto con La Pintana Unida. El Rey vivió con todo el ascenso. Acaparó sus historias de Instagram con imágenes y videos.