Su estrella número 27 de Liga obtuvo este domingo el Barcelona, luego de imponerse con claridad por 4-2 al Espanyol en el clásico catalán, en partido correspondiente a la fecha 34 del Campeonato de Primera División de España.
El encuentro comenzó con un cuadro visitante controlando el balón sin contrapeso y manejando con total comodidad el trámite del cotejo, por lo que las llegadas a la portería local fueron continuas en el RCDE Stadium.
Ya en el minuto 6 del primer tiempo Pedri desperdició una ocasión clara, tras enviar un remate que se fue rozando el poste derecho del arco defendido por Fernando Pacheco.
Sin embargo, dicha llegada sería un aviso de lo que vendría en el 11′, cuando el goleador Robert Lewandowski apareció en plena área chica para conectar un centro de Alejandro Balde, decretando la apertura de la cuenta en el duelo.
El dominio blaugrana se hizo más evidente en el minuto 20, cuando el propio defensa español mandó al fondo de las mallas un envío desde la derecha de Pedri, colocando el 2-0 a favor de los pupilos de Xavi Hernández.
Y cuando parecía que los elencos se iban al descanso con esa ventaja para los culés, otra vez el artillero polaco se hizo presente en el marcador para adelantar a su equipo -que en esos momentos ya acariciaba la copa- con un lapidario 3-0 en el 40′.
Ya en el complemento, Espanyol intentó reaccionar, pero Barcelona se encargaría de echar por el suelo las aspiraciones de los blanquiazules en el minuto 53′, ya que el francés Jules Koundé puso el cuarto tanto mediante golpe de cabeza tras un pase profundo de Frenkie de Jong.
Tras la diana del galo, el cuadro perico buscó el gol del descuento, pero la impericia de sus jugadores y la excelente faena del guardameta Marc-André ter Stegen evitaron que los aficionados locales celebraran al menos el gol del honor.
Pero la insistencia tuvo premio en el 73′, cuando Javi Puado aprovechó su opción y definió por encima del cancerbero alemán, decretando el 4-1 en el clásico de la ciudad.
A partir de ahí el cotejo se tornó de ida y vuelta, y en el segundo minuto de descuento (90+2′) los dueños de casa volvieron a marcar, esta vez a través de Joselu, estrechando las cifras 4-2.
Ya con el pitazo final, se desataron los festejos entre los jugadores culés sobre el terreno de juego; no obstante, aficionados locales invadieron la cancha molestos por la situación, provocando que los futbolistas corrieran a refugiarse a la zona de camarines.
Cabe recordar que con la goleada en el derbi catalán, los blaugranas lograron bajar la estrella número 27 de liga, sumando 85 puntos en la clasificación, diferencia inalcanzable para su escolta Real Madrid (71) a falta de 12 unidades por disputar. Asimismo, el título llega cuatro años después de su último festejo, el que se remonta a la temporada 2018-2019.
Por su parte, Espanyol (31) se mantiene penúltimo y seguramente deberá prolongar su lucha por evitar el descenso hasta la última fecha del certamen.