Luego de que salieran a la luz una serie de irregularidades que presentaba el Ninho do Urubu, centro de entrenamientos del Flamengo en el que murieron 10 futbolistas de entre 14 y 16 años durante la jornada del viernes, el Mengao dio una conferencia de prensa en la que intentaron aclarar el panorama, aunque sin recibir preguntas de la prensa.

Ricardo Belotti, CEO del Flamengo, fue quien dio la cara al respecto. "Me gustaría dejar claro que no es algo improvisado, que las instalaciones eran totalmente legales", comenzó declarando. Luego agregó que "fueron inspeccionadas y aprobadas por el ayuntamiento y por el Consejo para de los Derechos de los Niños y Adolescentes. Lo aprueban de manera regular. Igualmente fue aprobado por la Federación de Fútbol de Río de Janeiro y la Federación de Brasil, que aprobó un certificado para el Flamengo".

Sobre las 31 multas que le fueron cursadas al club, el Director Ejecutivo aclaró: "Las multas, licencias... eso no tiene nada que ver con el accidente. Tenemos que lograr que el campo sea legalizado. Estamos trabajando para ello. Necesitábamos nueve certificados, ya tenemos ocho". Belotti, además, manifestó que se está "hablando de alojamientos modulares implantados en 2011. Por esos alojamientos pasaron varios equipos, varios jugadores como Ronaldinho y Wagner Love. Fue utilizado por la selección olímpica de Brasil", destacó.

Finalmente, el CEO del club lanzó una crítica a la prensa y defendió al Flamengo: "Me gustaría hablar más de lo que invertimos desde que ocurrió el accidente, que es atender a los familiares de las víctimas. A partir del momento en que tuvimos el accidente, proporcionamos la llegada de los familiares. Dimos la privacidad necesaria en todo momento, además del soporte para que los cuerpos fueran identificados".