Uno de los temas más relevantes de estos días en Santiago 2023 ha quedado resuelto. Harold Mayne-Nicholls, director ejecutivo de la Corporación que rige los Juegos Panamericanos, anunció que la ceremonia de clausura se realizará en el Estadio Bicentenario de La Florida.
Noticia que en parte sorprende, porque pese a que el CEO había adelantado que el estadio donde juega Audax Italiano era una opción para la ceremonia, la principal carta siempre había sido el Estadio Monumental, específicamente por la capacidad de público que tiene y su cercanía con una estación de metro. De hecho, la rapidez con que se vendieron las entradas para la ceremonia inaugural fue un tema relevante en esta elección, ya que ningún recinto del país iba a poder igualar el público que estará en el Estadio Nacional el 20 de octubre. Se había pensado en el Parque Bicentenario de Cerillos, pero esta clase de actividades usualmente se desarrollan en estadios cerrados.
“Cerramos con La Florida, vamos a ir al Estadio Bicentenario, lo vamos a hacer en La Florida. Vamos a tener más posibilidad de que gente vaya al Estadio porque en Cerrillos era mucho más limitado”, comunicó Mayne-Nicholls en conversación con el Sonar Deportivo, de Radio Sonar.
Declaración que también fue de la mano con la explicación de por qué no se utilizará el Estadio Nacional. “No puede ser ahí porque hay pruebas de atletismo hasta el día anterior y resulta que necesitamos instalar todo el tema para estas cosas, no podemos simplemente llegar e instalarnos simplemente en el recinto. El Nacional se está ocupando para el atletismo porque así lo pidió la organización internacional, si no las pruebas hubiesen sido en el Mario Recordón y hubiésemos podido hacer la ceremonia ahí”, especificó.
Otros temas que abordó el ex presidente de la ANFP en la conversación son Radio Sonar fueron las sensaciones a solo 14 días del comienzo de los Juegos. “Con el frenetismo propio de cuando se van acercando las fechas, con la aparición de detalles que no se habían considerado, con un trabajo de cerca de 2.000 personas para sacar esto adelante y con la ansiedad propia de la cercanía a los Juegos”, expresó.
También explicó los problemas y situaciones que comienzan a asomar en estas fechas, cuando las competencias ya se respiran. “El detalle principal es que comienzan a llegar los atletas, el comedor comienza a funcionar, eso por la parte deportiva. En el papel está todo perfecto, pero después hay que ver. Puede ser que haya un lugar que no quedó bien iluminado o cosas de ese tipo, de las que tenemos que estar encima. En los recintos estamos poniendo las tribunas en la gran mayoría, poniendo las luces. La TV necesitan sistema de iluminación especifica”, adelantó.
Finalmente, habló de la sensación que percibe desde el público con el evento y cómo este se verá en el país. “Hay un gran ambiente, se va notando. Cuando partí todos hacían las preguntas de qué me motivaba a tomar este fierro caliente y hoy día debo recibir entre 10 o 15 Whatsapp diarios pidiéndome entradas para los eventos, entonces eso es un termómetro. Un cambio radical. Pasamos las 500.000 entradas vendidas, nos quedan muchas por vender, cerró.