El Atlético Madrid saltó a la cancha del Etihad Stadium haciendo caso omiso al análisis previo de Pep Guardiola. Los españoles no fueron “más ofensivos de lo que la gente cree”, según había anticipado el técnico del Manchester City, en el duelo que marcó los cuartos de final de ida de la Champios League. Los Colchoneros se defendieron con dos líneas de cinco y la mayor parte del tiempo jugaron en campo propio.
Por eso no extrañó que los ingleses se hicieran rápidamente del control del juego y que João Cancelo se convirtiera en el titiritero de los locales. Los de Diego Simeone jamás soltaron sus líneas e impidieron que el City pateara al arco en todo el primer tiempo.
No fue hasta el minuto 53, y tras un contragolpe mal aprovechado por la visita, que Kevin De Bruyne logró calentar las manos del arquero Jan Oblak con un tiro libre rasante. El pleito parecía ser más parejo, incluso un poco más abierto, hasta que el marcador se abrió como suele hacerlo en este tipo de eventos: con una genialidad.
Corría el minuto 69, cuando el recién ingresado Phil Foden (salió Riyad Mahrez) metió un pase que descolocó a tres defensores del Atlético y dejó solo frente al arco a Kevin De Bruyne, quien con una definición cruzada venció a Oblak.
Tras ello, ambos cuadros parecieron mantener el marcador. Si bien los anfitriones buscaron nuevas oportunidades, también dejaron que el Atlético tomase algo de protagonismo. Más allá de las intenciones de ambos elencos, el marcador no se movió. La llave quedará abierta hasta el próximo miércoles 13 de abril, a las 15 horas.
Liverpool se abraza de visitante
En el otro encuentro por los cuartos de final de la Champions, jugaban el sorprendente Benfica y poderoso Liverpool. Y la categoría de los ingleses quedó demostrada desde el inicio pues el defensa Ibrahima Konaté aprovechó un córner servido por su compañero Andrew Robertson, para abrir la cuenta con un formidable cabezazo (17′).
Pero la visita no se iba a quedar conforme con ese resultado y fue por más. Fue así como Luis Díaz asistió a Sadio Mané para que metiera un derechazo a quemarropa y pusiera el 0-2 tranquilizador (34′). Los locales parecían no sentir el golpe y apenas comenzó el segundo tiempo, a los 49′, Darwin Núñez puso el descuento y un aviso para quienes creían que se entregarían fácilmente.
De hecho, a los 52′ y a los 55′, tuvieron la oportunidad de igualar el marcador con dos llegadas del mismo Núñez y en los sesenta, Éverton tuvo una chance inigualable que Alisson Becker atajó de manera formidable.
Los locales sintieron el trajín y poco a poco se fueron apagando permitiendo que la visita volviese a ser protagonista. Actitud que los llevó a tener varios acercamientos, hasta que Naby Keïta le metió un pase en profundidad a Luis Díaz para sellar el 1-3 a los 87 minutos. La vuelta se jugará el próximo miércoles 13 de abril, a las 15 horas.