Champions League: el Marsella de Alexis Sánchez busca enrielar el rumbo tras su negativo arranque en el torneo más importantes de Europa

En agosto pasado, después de varias semanas, y muchos tira y afloja desde ambos lados, Alexis Sánchez encontró su destino futbolístico en Marsella, el club que lo devolvería a la elite del fútbol, tras su salida de Inter de Milán.

Sin embargo, la jugada del delantero chileno no ha sido del todo buena. Si bien el equipo está segundo en la tabla de la Ligue 1 de Francia, detrás del millonario Paris Saint-Germain, el equipo no logra levantar cabeza en la Champions League, la eterna obsesión del Niño Maravilla.

El cuadro que dirige el croata Igor Tudor suma dos derrotas en igual cantidad de partidos por el Grupo D. En la primera fecha, visitó a Tottenham Hotspur y cayó por 2-0. En la segunda fecha, recibió a Eintracht Frankfurt -campeón de la Europa League- y cayó por la cuenta mínima.

En ese escenario, el duelo de hoy ante Sporting de Portugal (13.45) asoma como clave para el futuro del elenco de Provenza que, debe ganar sí o sí, para mantener opciones de avanzar a los octavos de final de la competencia.

Para colmo, el cuadro del delantero chileno deberá jugar a puertas cerradas tras la sanción impuesta por la UEFA, luego de los incidentes protagonizados por los hinchas marselleses y los de Frankfurt, en el último partido disputado en el estadio Vélodrome.

“Es una pena, pero hay que aceptarlo. Echaremos de menos a nuestros seguidores, pero esto no cambia la preparación para el encuentro, tampoco su enfoque”, dijo el técnico Igor Tudor en la antesala del duelo.

Sobre el momento en el torneo, el balcánico explicó que “no necesito quitarles la presión a los jugadores. Es normal que exista en todos los partidos. Solo tenemos que configurar nuestro juego e intentar que no se nos escape nada. En la Champions League no jugamos mal, hicimos buenas actuaciones contra equipos fuertes”.

La presente temporada es la duodécima consecutiva en la que Sánchez disputa la máxima competencia mundial, a nivel de clubes. Desde su traspaso desde Udinese a Barcelona, en julio de 2011, el artillero histórico de la Roja nunca faltó a una cita de este tipo.

Precisamente, en sus tres temporadas con el cuadro blaugrana, el chileno logró sus mejores participaciones en la Champions League. En el curso 2011-’12, el elenco de Pep Guardiola cayó en la semifinal ante Chelsea de Inglaterra, equipo que a la larga fue campeón.

En la versión siguiente, ya con Tito Vilanova en la banca, el cuadro culé también quedó eliminado en la ronda de los cuatro mejores, nuevamente con el monarca, que en esa ocasión fue Bayern Münich.

En la 2013-’14, llegó hasta cuartos de final, cuando quedó eliminado de su compañero en LaLiga Atlético de Madrid, que luego perdería la final ante Real Madrid.

En sus tres torneos siguientes, no pasó de octavos de final con Arsenal de Inglaterra. A mitad de la temporada 2017-’18 jugó la misma instancia con Manchester United.

Con los mismo Diablos Rojos, volvió a llegar a la ronda de los ocho mejores equipos, pero quedó en el camino ante el Barcelona, su exequipo. Tras su traspaso a Inter de Milán, el cuadro nunca logró fraguar buenas actuaciones; dos pobres actuaciones en la fase grupal y la última eliminación en octavos, frente a Liverpool, donde incluso Sánchez vio la tarjeta roja en Anfield Road.