La rivalidad más repetida en la historia de la Champions League respondió a las altas expectativas. Real Madrid rescató un empate 2-2 ante Bayern en Múnich y dejó todo abierto para la semifinal de vuelta, el miércoles 8 de mayo en el Bernabéu.
Un escenario en el que el cuadro bávaro cumplió su promesa. Tal como adelantó su técnico Thomas Tuchel tomó la iniciativa desde el primer minuto y atosigó al cuadro merengue, que ya se acostumbra a este tipo de partidos.
A solo segundos del comienzo, los alemanes ya habían puesto a prueba la resistencia del meta ucraniano Andriy Lunin, una de las piezas clave para poner otra vez a los blancos entre los cuatro mejores de la Champions.
Esta vez el golero estuvo notable para evitar el primero. Una pared perfecta entre Harry Kane y Leroy Sané dejó solo a este último, quien se encontró con el achique del arquero blanco.
Después de esa verdadera declaración de principios, el pressing del elenco muniqués se hizo minuto a minuto más asfixiante. Pero no lograban profundidad, el Madrid se agrupaba bien en el fondo y limitaba al rival a remates desde el borde del área.
Intentó Sané, lo mismo hizo Kane. Sin embargo, sus respectivos disparos se fueron por muy poco sobre la portería visitante. Lo mismo sucedió con Jamal Musiala, quien tampoco pudo dar con el arco.
Y es que este Madrid de Carlo Ancelotti se acostumbró a jugar de esta manera. Una resiliencia a toda prueba, con jugadores que defienden muy bien al hombre y en los espacios. Tal como lo manejó ante el City lo hizo esta vez en casa de los bávaros.
Tras ese cuarto de hora inicial de presión, el equipo hispano se soltó un poco más en la cancha. Los germanos se replegaron un poco y el Madrid encontró el momento y el lugar.
Pero el silbado Toni Kroos (no quiso extender contra con Bayern en 2014 y tuvo que ser vendido al Madrid en US$ 27 millones) tenía en sus pies la manera de penetrar a su exequipo.
A los 24 minutos, el volante germano vio el espacio preciso y detectó el movimiento de Vinicius Junior. El europeo habilitó al brasileño entre cuatro rivales y este último quedó solo frente a Manuel Neuer para el 1-0 del cuadro visitante.
El equipo local sintió el golpe y sus llegadas al arco oponente se hicieron más esporádicas. En el final del primer tiempo, un tiro libre de Kane que se fue ancho, se anotó como la más peligroso antes del descanso.
Remontada y empate
En el comienzo del tiempo complementario, el equipo muniqués volvió a pasar contratiempos. Esta vez fue una rápida salida del cuadro español que terminó en un remate de Kroos que Neuer sacó con la mano cambiada para evitar el gol.
Pero si el Madrid sabe levantarse, los equipos alemanes han dado cátedra durante años en el fútbol sobre este mismo aspecto. A los 53 quedó completamente demostrado, cuando Sané enganchó hacia adentro y logró el 1-1 con un potente disparo entre el vertical y Lunin.
Pasaron segundos hasta que Lucas Vázquez derribó a Musiala en el área. El árbitro Clément Turpin no dudó en cobrar el penal y Kane no falló para dar vuelta el marcador, a los 57 minutos.
Entonces el duelo fue de ida y vuelta. Vinicius no pudo encontrar el remate final a los 64′. Y, tres más tarde, Kane se perdió el tercero de los bávaros cuando su remate rozó en un contrario para salir al tiro de esquina.
Vinicius se midió con Neuer a los 78 minutos, pero el portero capitán del cuadro muniqués salió airoso en el duelo para mantener la ventaja de la escuadra teutona.
Sin embargo, los brasileños del Madrid tenían una última travesura. Vini se internó en el área y habilitó de un toque a su Rodrygo, quien fue derribado por el central coreano Kim Min-Jae. Una falta que Vinicius Junior se encargó de convertir el gol, a los 83′.
Un empate final que fue justo y que deja todo para el duelo de, vuelta que se jugará en la capital hispana, el próximo 8 de mayo. Ambos equipos se han eliminado de manera directa en 12 ocasiones, con siete éxitos para los hispanos y cinco para los germanos.
De paso, Real Madrid sumó ocho partidos sin caer ante el equipo bávaro con cinco victorias y tres empates. El la peor racha del Bayern ante cualquier equipo en la Champions League.