La práctica de la Roja, esta tarde en el complejo deportivo del Sao Paulo, tampoco arrojó buenos indicios sobre la lesión de Charles Aránguiz. El Príncipe, junto a parte del cuerpo médico, caminaba alrededor de una cancha, mientras el resto del plantel trabajaba en otro sector del recinto. Los doctores no exigieron en ningún momento al Príncipe, quien se desgarró hace una semana en Alemania. Esto demuestra que es prácticamente imposible que esté frente a Brasil.
Esteban Paredes, en tanto, aportó a las malas noticias para Pizzi. No estuvo en el entrenamiento por un cuadro gripal. El médico recomendó reposo en el hotel. De todas maneras, no está descartado.
Edson Puch, por su parte, tras asistir al funeral de un familiar en Iquique, finalmente se integrará esta noche a la concentración en Sao Paulo.