Atlético de Madrid no pudo dar vuelta la serie. El equipo hispano cayó por 2-0 en Stamford Bridge ante Chelsea y dijo adiós a la Liga de Campeones. Chelsea vuelve a cuartos por primera vez desde 2014 y se eleva como el tercer cuadro británico en la instancia, junto con Manchester City y Liverpool.
Era una gran montaña la que tenía que escalar Atlético de Madrid. Perder por la mínima en la ida ante Chelsea, como local en Rumania, hizo todo más complicado para meterse entre los ocho mejores clubes de Europa por segundo año consecutivo.
Pero los españoles hicieron el trabajo. En los primeros minutos presionaron alto, tratando de obligar al error británico. Sin embargo, los Blues poco a poco se fueron sintiendo más cómodos en su cancha. La máquina del técnico alemán Thomas Tuchel, invicto desde que llegó al club en enero pasado, mostró eficiencia y rendimiento, sobre todo cuando el partido se jugaba en 50 metros del campo.
Todo mientras la presión del reloj y el global en contra, le ponían nuevos escollos al ascenso colchonero. Una cima que se hizo aún más empinada para los madrileños con el primer gol del partido.
Y no podía ser de otra manera, con el Atlético volcado en el campo de Chelsea y con dos de los mejores del ataque azul. A los 34 minutos, el alemán Kai Havertz (el jugador más caro de esta temporada) generó un rápido contragolpe que terminó en los pies de otro germano, Timo Werner -el futbolista que marca 11,1 en los 100 metros- quien ganó la línea de fondo para que el marroquí Hakim Ziyech la empujara al arco de Jan Oblak.
El Atlético no salió de su sorpresa y el rival, incluso, pudo aumentar las cifras a inicios del segundo tiempo. Sin embargo, el remate bajo de Werner fue contenido de manera notable por Oblak.
Sin ideas y con poca profundidad, el cuadro español poco a poco se fue hundiendo en su desesperación. Frustración que vivió su momento máximo con la torpe expulsión de Stefan Savic, a los 81′, sorprendido in franganti agrediendo a un rival.
Prácticamente, fue la última paletada en la tumba de los albirrojos. Los británicos pudieron aumentar la cifra un par de veces, pero Oblak respondió de buena manera. Sin embargo, no pudo evitar el reate cruzado de Emerson Palmieri cuando el duelo se acababa con un justiciero 2-0.
Chelsea ganó 2-0 y vuelve a la fase de cuartos de final de la Champions después de siete temporadas. Pero lo mejor de todo, es que el técnico Tuchel sumó su novena victoria en 13 partidos (que además suma cuatro empates) desde que tomó al cuadro de Stamford Bridge.