Por primera vez en la historia, el Team Chile tendrá dos abanderados. Lo hará siguiendo las recomendaciones del Comité Olímpico Internacional, que sugirió a los países participantes elegir a un hombre y a una mujer como portaestandartes, en línea con las políticas de igualdad de género impulsadas por la entidad. Así, tras un amplio debate, el directorio del COCh eligió a la tiradora skeet Francisca Crovetto y al voleibolista de playa Marco Grimalt como los encargados de cumplir con esta tradición en la ceremonia inaugural del 23 de julio.

La elección se sentenció el martes y en ella participaron los nueve miembros del directorio, que encabeza Miguel Ángel Mujica, además del miembro COI, el expresidente Neven Ilic. La undécima integrante, que representa a los deportistas, es la propia Crovetto, quien no participó de la discusión. Más allá de los argumentos expuestos, se sometió a votación y en general hubo consenso en esta elección.

Crovetto (27 de abril de 1990) llegará en un momento estelar de su carrera tras destacar en la Copa del Mundo de Tiro Skeet de Croacia, donde obtuvo una plata y un oro por equipos mixtos. En Asia intervendrá por tercera en una cita de esta envergadura, tras participar en Londres 2012 y Río 2016. Y, de hecho, fue una de las tres candidatas a ser abanderada en la votación popular realizada para el evento disputado en Brasil, cuya ganadora finalmente fue la hoy diputada Érika Olivera. Además, es presidenta de la Agrupación de Deportista de Alto Rendimiento DARChile.

Por otra parte, Grimalt (11 de julio de 1989) participará por segunda vez en la cita, marcando un hito para su deporte. Junto a su primo y flamante capitán del Team Chile, Esteban Grimalt, ha brillado en los últimos años en los distintos circuitos internacionales, y haciendo historia para el país en los últimos Panamericanos de Lima, donde se quedaron con el oro.

Los pormenores de la elección

Entre los aspectos que primaron para la elección de ambos representantes, se encuentran aspectos deportivos y humanos. De hecho, ambos deportistas elegidos despiertan un gran respeto y cultivan una gran relación con sus colegas. Por otra parte, algunos exponentes quedaron descartados desde un comienzo. Es el caso de Joaquín Niemann, quien por calendario tiene previsto su arribo a Tokio el 26 de julio, tres días después de la ceremonia y que, por motivos personales, no tenía posibilidades de adelantar su prensencia en Japón. En tanto, hubo otros deportistas, como el ciclista Martín Vidaurre y la futbolista Christiane Endler, que estaban bastante lejos de la capital nipona, por lo que les resultaba imposible acudir al llamado.

También se acordó la elección de la abanderada de cierre para la ceremonia de clausura del 8 de agosto. Será la canoísta María José Mailliard, quien tampoco podía estar en la ceremonia inaugural por razones de planificación, por lo que se determinó premiar su gran temporada, en la que ha conquistado diversas preseas en las últimas Copas del Mundo y que la ponen como una de las cartas nacionales más fuertes para obtener una medalla en la cita olímpica.

La canoísta María José Mailliard, en una imagen de archivo.