Chile salva un punto y la ilusión

Un empate merecido, que se ajustó al nivel de juego exhibido por ambos cuadros, fue el que protagonizaron anoche la selección nacional y Colombia, por la segunda fecha del Grupo A de la Copa América Femenina.

Chile enfrentaba al rival de mayor jerarquía en el subcontinente, descontando al todopoderoso Brasil, y pese a que los amistosos recientes habían mostrado un gran equilibrio, fueron las colombianas quienes manejaron más y mejor el balón en el primer tiempo.

Lo hacían con un buen trabajo de las volantes, quienes basaban su pulcritud en la salida clara desde las zagueras, sobre todo de Corina Clavijo e Isabella Echeverry.

A eso, se sumaron un par de indecisiones de las centrales nacionales, errores que casi cuestan la apertura de la cuenta a favor de las caribeñas. En ese sentido, fue extraño ver con dudas a Camila Sáez y Carla Guerrero, habitualmente muy seguras el fondo.

Eso, propició un riesgo absoluto para el arco de Christiane Endler, pero, para su fortuna, Yoreli Rincón y Catalina Usme estuvieron muy imprecisas al rematar.

Ala inversa, los ataques chilenos fueron menos punzantes y se produjeron gracias a algunos centros de Francisca Lara, Yesenia López yMaría JoséRojas, aunque sin representar grandes urgencias para la portera Sandra Sepúlveda.

Se trató, de cualquier modo, de un período de constante lucha en el mediocampo, con ambos equipos muy compactos, con escasa distancia entre sus líneas.

En la reanudación, todo se complicó a los cinco minutos, cuando Usme anotó en área chica, luego de un pivoteo de Clavijo y un afortunado toque de Daniela Montoya.

La reacción vino a través de Rojas, quien a los 57' avisó con una gran jugada individual, que concluyó con un tiro algo exigido y con poco ángulo que, por cierto, terminó en las manos de Sepúlveda.

Cambio ofensivo

Después de esa acción, el técnico José Letelier decidió plantear una formación más agresiva, al hacer ingresar a María José Urrutia en lugar de Yesenia Soto, retrasando a la ariete Marjorie Hernández a faenas creativas.

Un contragolpe rapidísimo de Ospina, no obstante, casi significa el segundo tanto para Colombia, pero desvió. Y casi de inmediato, un tremendo disparo de Usme -desde 28 metros- exigió a fondo a Endler, quien sacó al córner.

Desde los 66', vinieron los mejores momentos para la Roja, con mucha angustia para la zaga colombiana, con un centro de Araya que casi sorprende a Sepúlveda al cerrarse hacia el arco y luego con ataques armados con rapidez desde el mediocampo, a los que sólo les faltó el toque preciso en la finalización.

Pero esa precisión llegó con un balón detenido:un tiro libre cruzado fue pivoteado por Guerrero y, en la boca del arco, apareció Sáez para anotar la anhelada igualdad. Premio para un período que, en el resumen, perteneció a Chile.

Luego vendrían otras emociones, con la Roja dominando, aunque sin variar el marcador.Lo concreto es que el empate deja intactas las posibilidades clasificar al cuadrangular final. Y ahí comienza otra historia.