Nicolás Jarry estira la serie en Santiago. El número 20 del mundo le ganó por 6-2 y 6-4 a Juan Pablo Varillas para dejar todo igualado en el Estadio Nacional. Que Chile sea parte de las 16 mejores selecciones del torneo dependerá de Alejandro Tabilo, quien tendrá que definir ante el joven peruano, Ignacio Buse.
De una de sus peores derrotas jugando por Chile, donde él mismo admitió haber tenido un partido derechamente malo, a un recital de tenis en menos de 24 horas. Así de extremo fue el paso de Nicolás Jarry por el Estadio Nacional para esta serie de Davis. El chileno trae de vuelta las ilusiones luego de una compleja derrota en el dobles. Todo queda 2-2 gracias a la raqueta número uno del país.
Fue un partido perfecto, donde desde el minuto uno consiguió todo lo que se propuso. Quebró de entrada y arrancó con los servicios ganadores. Fue un arma letal, que nunca pudo contener Varillas. El peruano intentó incomodar con un buen juego defensivo, pero todos sus intentos fueron fallidos. Jarry estuvo intratable. Cerró el primer parcial por 6-2 tras un juego donde conectó sus cuatro primeros servicios. Los números de la manga reflejan ese nivel tremendo: 93% de los puntos ganados con el primero, 100% de ganados con el segundo, 10 chances de quiebre y marcas máximas de 217 kilómetros por hora con el saque.
Todo eso se tradujo en un golpe de confianza que siguió presente en el segundo set. Ya no con tantas diferencias de juego, Jarry fue capaz de mantener el control del juego. Muy fuerte en sus juegos, encontró el castigo en el quinto juego, quedando 3-2 y servicio. Quiebre que desató la locura del público y sirvió como el impulso definitivo para liquidar el encuentro. 6-4 final para estirar el drama.
Tabilo y Barrios no pudieron en el dobles
El día comenzó con una derrota que instaló el dramatismo en la serie. El binomio nacional compuesto por Alejandro Tabilo y Tomás Barrios cayó en dos sets ante los hermanos Huertas del Pino, dejando a Chile al borde de la eliminación. De hecho, si Jarry hubiese perdido ante Varillas, el sueño de la Davis se habría terminado ahí.
El partido además fue un golpe para una dupla que se estaba acostumbrada a buenos resultados en la Copa Davis, pero que sobre el cemento del Nacional no estuvieron ni cerca de sus mejores versiones. Superados en lo táctico y en lo anímico, los nacionales nunca lograron meterse en el encuentro, cayendo por 5-7 y 3-6. Ya en los primeros dos juegos de servicios del partido tuvieron que resistir cuatro puntos de quiebres. Chile en todo el partido tuvo una sola chance de llevarse el servicio de la dupla peruana.