Una mañana normal en el aeropuerto de Santiago se tiñó de rojo. De a poco, madrugadoras hinchas comenzaron a poblar los pasillos del recinto. Desde niñas a adultos mayores se agruparon para esperar a la selección nacional femenina que arribó muy temprano este sábado, tras su eliminación del Mundial de Francia.
Las primeras en llegar fueron las fans de Yesenia López. Madre e hija viajaron desde la Quinta Región para recibir a la volante en conjunto con el resto de las seleccionadas, que arribaron a las 7.51. Ellas estaban media hora antes. "La idea de venir nació luego del partido ante Tailandia, nos pusimos de acuerdo a través de redes sociales", cuenta Javiera Morales, líder del fan club. Al llamado acudieron cerca de 40 hinchas, en su mayoría mujeres, que con banderas y posters esperaban entusiasmadas.
El clásico "ce-hache-í" animaba la fiesta en un aeropuerto que observaba extrañado; eso, hasta que se enteraban de que las mundialistas llegaban y la expectación crecía. El susto llegó cuando el bus de las seleccionadas se estacionó en un lugar no esperado, el sector preferencial. Tras una corrida, la hinchada llegó a tiempo, y mientras esperaban la salida de las futbolistas, gritaban, y hasta cantaron el himno nacional.
Cabizbajas y autocríticas
Cerca de las 9.00, cuando a lo lejos se comenzaron a divisar las seleccionadas, la expectación llegó a tope. Casi todas las jugadoras se dieron el tiempo para compartir, sacarse fotos, y firmar poleras, álbumes o posters. "¡Secas!, ¡Las amo!, ¡Grandes, chiquillas!", vitoreaba la hinchada.
Entre todo el caos, el estratega José Letelier aprovechó de pasar desapercibido y subirse al bus sin saludar ni dar declaraciones. La critica al DT es que debió dar oportunidades a jugadoras de experiencia, principalmente a María José Rojas, quien pasó de ser titular indiscutible en la Copa América, a jugar poco más de 10 minutos en la cita mundialista.
Algo similar ocurrió con Francisca Lara, quien se acercó brevemente a la fanaticada, recibió apoyo, y se retiró rápidamente. Sin duda la más cabizbaja del plantel. "A la Pancha siempre la apoyamos, aquí perdemos y ganamos todas juntas", manifestó María José Urrutia, quien al igual que el resto del plantel, no responsabiliza a nadie por la eliminación. Fue Christiane Endler quien sacó la voz una vez más por el equipo y agradeció a los presentes. Sobre la eliminación, solo hubo autocrítica. "Pudimos haberlo hecho mejor. No estamos contentas, queríamos más", manifestó la capitana. En la misma línea, la autora del único gol de las Rojas en el Mundial, María José Urrutia (el otro tanto fue un autogol), lamentó no pasar a octavos: "Queríamos avanzar más... Nos quedamos abajo de nuestro sueño".
Después de unos escasos 10 minutos con los fanáticos, el plantel emprendió rumbo hacia la ANFP, donde las esperaba su círculo más cercano. Posteriormente, las jugadoras fueron liberadas a sus vacaciones, aunque algunas, como Guerrero, Rojas, Aedo, Huenteo, y Torrero, aprovecharon para quedarse unos días en Francia, junto a sus familiares.
Las Rojas retomarán sus ligas al regreso de vacaciones, y su retorno a la Selección, en competencias oficiales, será para disputar un cupo a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, donde se enfrentarán al segundo lugar de la Copa de África, el que recién se conocerá en enero del próximo año. El partido válido por el repechaje se jugará en Japón, a meses del inicio de la cita de los anillos. "Estamos tranquilas, veremos que pasa. Hay que esperar", proyecta Karen Araya.