El paso de la selección nacional por el Mundial de Balonmano terminará este miércoles 24 de enero. Lo harán ante Túnez en un partido que definirá al ganador de la Presidents Cup, una instancia de consuelo que existe para los países que quedan eliminados en la fase grupal. De vencer a los africanos quedarán como el 25° mejor combinado de la cita planetaria.
Una marca que permitiría a los chilenos quitarse parte de la espina que significó no superar el Grupo A del campeonato mundial, ya que ese era el objetivo del equipo al llegar a Polonia. “Nosotros lo tenemos clarísimo. Nuestro partido a ganar en el Mundial es contra Irán. Ya si ganamos ese partido pasaríamos terceros del grupo si ganamos los dos siguientes, pero yo creo que ya ganando a Irán tenemos que enfocarnos en Montenegro que es un partido muy difícil, pero vamos a tener nuestras opciones si estamos bien”, comentaba Esteban Salinas antes de debutar.
Pero en la cancha los resultados no se dieron y Chile volvió a quedar eliminado en fase grupal. Es la séptima vez en siete Mundiales disputados. Una etapa imposible de superar hasta el momento y que terminó llevando al equipo chileno a disputar nuevamente la Presidents Cup. Este mini torneo reúne a todos los equipos que quedaron eliminados en fase de grupos y sirve para definir a los puestos entre el 25 y 32. En esta instancia “Los Lobos” han derrotado a Corea del Sur, Uruguay y Arabia Saudita.
Eso sí, pase lo que pase este miércoles, Chile quedará con su segundo peor registro en un Mundial de Balonmano. Lo realizado en Polonia 2023 será más positivo que lo logrado en Egipto 2021 donde quedaron 27°, pero negativo en comparación a las primeras cinco ediciones disputadas. Alemania-Dinamarca 2019 sigue siendo el mejor resultado histórico (16°) de la selección que ahora dirige Aitor Etxabru.
Y es que ese detalle no es menor, porque los nacionales llegaron a este Mundial de la mano de un nuevo técnico. Tras seis años de trabajo, Mateo Garralda dejó de ser el Head Coach de la selección y emigró a Egipto, provocando un cambio grande en el trabajo del equipo. Pese a que los jugadores son los mismos y el nuevo entrenador viene de una escuela muy similar, el tiempo de trabajo ha sido poco.
De hecho, su primera concentración fue para este torneo. Por eso los jugadores admitieron siempre que se necesitaba más tiempo para evaluar. Santiago 2023 asoma como la gran prueba para un equipo que ya comienza a tener aires de recambio, pero que aún cuenta con sus referentes como jugadores clave.
En un terreno más cercano, Túnez es la última prueba de este Mundial. Buscarán la victoria y despedirse de Europa como los mejores entre los países que no pasaron la fase de grupo. La acción parte este miércoles a las 16:30 hora nacional.
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