Chile vence a Ecuador y da otra muestra de carácter
La Baby Roja se cobró revancha de la derrota sufrida en la primera fase frente a Ecuador y, sin hacer un buen partido, comenzó con el pie derecho el sueño de acceder a Brasil 2019.
Cuando el fútbol falta, valen el corazón, el empuje y la garra. Si a eso se suma orden defensivo y aprovechar las pocas que se tienen, es posible conseguir un resultado positivo, como este martes le ocurrió a la Baby Roja ante Ecuador, en el estreno en el hexagonal del Sudamericano Sub 17. Un trabajado triunfo por la cuenta mínima que le da un impulso a Chile en su afán de clasificar al Mundial de Brasil.
No era fácil el estreno para el equipo de Hernán Caputto. Al frente estaba el único equipo que hasta aquí lo había derrotado en el certamen y que cuenta, encima, con el goleador del campeonato y quizás, una de sus máximas figuras, Johan Mina. Todo eso, sin embargo, lo supo contrarrestar Chile.
La Baby Roja tuvo que poner todo lo que hay que poner cuando el fútbol no aparecía. Porque en la primera etapa, por ejemplo, recién a los 10 minutos pudo comenzar a rondar el arco rival. Primero con Aravena, que demoró más de la cuenta, y luego en un cabezazo de González, que desvió por poco.
Pero, dicho está, Chile tuvo que extremar recursos para mantener su arco en cero. Eso, claro, y también porque contó con la ineficacia de los rivales. A los 17' se salvó de milagro porque Mejía definió horrible.
A esa altura, la escuadra nacional no tenía la pelota, pero estaba bien replegada. Y Ecuador, con un libreto claro, cada vez empujaba más. Tati también salvó una llegada rival.
Si algo ha caracterizado a los equipos juveniles de Caputto, en este y el pasado Sudamericano, son los balones detenidos. Por esa vía intentaba inquietar y por esa vía comenzó a equiparar las acciones. Sobre el final de la primera parte, quizás por el cansancio ecuatoriano, Chile tuvo un poco más el balón.
Había que hacer algo para torcer el destino en la segunda mitad. O al menos para evitar que Ecuador siguiera teniendo las mejores oportunidades. Fue entonces cuando Aravena empezó a aparecer más, a generar algo de fútbol e incluso ser alternativa en ataque.
El nacer del complemento fue sin dudas más disputado y mientras el chileno Gonzalo Tapia estuvo encendido, marcó diferencias. Y Luis Rojas también aportaba lo suyo con balones profundos y con mucha intención.
El esfuerzo, eso sí, comenzó a hacer mella en en la escuadra criolla. Ecuador otra vez se apoderó de las acciones y tuvo las mejores ocasiones, como a los 58', cuando Mejía, uno de los mejores del rival, estrelló un remate de larga distancia en el travesaño.
La Baby Roja se contentaba con los contragolpes. Los laterales pasaban poco y las jugadas de riesgos de Chile se limitaban a que alguna individualidad torciera el compromiso. Y así no más ocurrió cuando dos de los mejores de la escuadra nacional lograron combinarse.
Fue a los 81', cuando otra vez un pase de Rojas logró romper el cerco rival. Esta vez, superó por aire la resistencia de los zagueros ecuatorianos y Aravena, que falló en el primer intento por definir la jugada, logró el tan anhelado gol de la victoria. Fue un desahogo.
Chile se cobró revancha de Ecuador cuando más importaba. Cuando los puntos ganados o perdidos significan quedar dentro o fuera de una cita planetaria. Porque vencer en un cotejo en el hexagonal acerca mucho el objetivo de obtener pasajes para el torneo que se jugará en Brasil. Si en otras ocasiones, hasta con cinco puntos algunos elencos han clasificado. Con siete unidades todos han asegurado presencia mundialista.
Ahora vendrá el local Perú y un nuevo escollo para alcanzar el gran objetivo de Caputto, que es clasificar por segunda vez consecutiva a un Mundial Sub 17. Por ahora, el primer desafío del hexagonal se superó con coraje, garra y pundonor.
En los restantes partidos de la jornada, Uruguay y Paraguay terminaron empatados 2-2. Por su parte, Perú y Argentina repartieron unidades luego de dejar el marcador 0-0.
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