Clásico turco suspendido por incidentes se reanudará el 3 de mayo sin público

El clásico de Estambul entre el Fenerbahçe y el Besiktas por semifinales de la Copa de Turquía, interrumpido el pasado 19 de abril debido a varios incidentes, se reanudará el 3 de mayo a puerta cerrada, señaló este miércoles la Federación Turca de Fútbol (TFF).

Este duelo, que se jugaba en el campo del Fenerbahçe, fue interrumpido en el minuto 57 debido al lanzamiento de objetos. La gota que colmó el vaso fue el que impactó en la cabeza del técnico del Besiktas Senol Günes, que pasó la noche en el hospital.

En una reunión celebrada este miércoles, la TFF decidió que el encuentro se termine el 3 de mayo "desde donde se había anulado". Se jugará a puerta cerrada "por precaución", añadió la federación en un comunicado. Además, la comisión de disciplina de la Liga de Fútbol Turca (PFDK) anunció este miércoles varias sanciones ligadas a los incidentes del derbi.

El Fenerbahçe deberá jugar sus tres próximos partidos de local a puerta cerrada y pagar una multa de un millón de libras turcas (sobre 200.000 euros). Por parte del elenco de Gary Medel, su arquero suplente Tolga Zengin y el central Pepe, fueron sancionados con un partido de suspensión.

Los incidentes que provocaron la interrupción del Fenerbahçe-Besiktas suscitaron una nueva ola de indignación y se reavivó el eterno debate sobre la violencia en los estadios turcos. Günes, de 65 años, que recibió cinco puntos de sutura en los vestuarios, salió el pasado viernes del hospital, donde pasó una noche en observación.

El Besiktas anunciará el jueves si acepta o no jugar los 33 minutos restantes. El partido estaba empatado sin goles y en la ida habían igualado 2-2. Lejos de apaciguar el fuego, la directiva del Fenerbahçe exigió una victoria por secretaría, estimando que el Besiktas había abandonado el terreno de juego. El martes el presidente del Fenerbahçe, Aziz Yildirim, acusó a Günes de haber hecho "cine" fingiendo estar herido.