El París Saint-Germain derrotó por 3-0 al Girondins de Bordeaux, por la fecha 28 de la liga francesa. El resultado quedó absolutamente en un segundo plano, porque las principales acciones del partido sucedieron en las tribunas. Los fanáticos del poderoso club de capitales qataríes no se quedaron callados después de la dolorosa eliminación de la Liga de Campeones, a manos del Real Madrid.
Neymar y Lionel Messi fueron el foco más mediático de la molestia de los hinchas del PSG, siendo abucheados en cada momento que tocaron el balón durante el cotejo de este domingo, en el Parque de los Príncipes. Incluso, tras anotar el segundo gol ante el colista de la Ligue 1, el brasileño se llevó los abucheos del público. La Pulga tampoco escapó de la silbatina. Todo comenzó desde que fue presentada la formación titular del equipo, por altoparlantes. Cada vez que el locutor nombrada a los jugadores, uno por uno, se escuchaba una sonora pifiadera. El único que se salvó fue Kylian Mbappé, quien precisamente fue el mejor del elenco en la visita al Santiago Bernabéu.
También en el estadio se vio una pancarta con la frase “Direction Demission” (Directiva Dimisión), apuntando en específico al director deportivo Leonardo y al presidente Nasser Al-Khelaifi. No fue lo único. Otro lienzo decía: “Mbappé a Paris. Leonardo au pilori” (Leonardo en la picota). Además, los ultras (la barrabrava) del PSG, más conocidos como la CUP, exigieron la salida del dirigente qatarí a través de un comunicado que se divulgó el sábado. Varios aficionados en la tribuna Auteuil del Parque de los Príncipes ingresaron con un retraso de 15 minutos, en señal de protesta por el desenlace del club en la Champions.
“Estoy triste por lo que viví hoy”, dijo el entrenador Mauricio Pochettino, quien se notaba visiblemente afectado por la coyuntura del PSG. Durante el partido, apenas se movió del banquillo. “A nadie le gusta este fondo, me puso muy triste lo que pasó”, añadió el argentino, uno de los más criticados luego de un nuevo tropiezo a nivel continental de un equipo que se construyó, justamente, para ganar la Champions.
Además, los parisinos se quedaron afuera de la Copa de Francia, por lo tanto el único objetivo que queda en la temporada será el torneo local, en el que llevan una extensa ventaja sobre su escolta. “Todos estamos afectados, sentimos una desilusión y frustración. Somos responsables, pero debemos asumir los próximos objetivos”, declaró Pochettino, a quien se da por descontado que será reemplazado al cabo del presente curso.