Cobresal gana la liguilla tras milagrosa remontada y va por el ascenso

Una Hazaña. Así se puede describir lo hecho por Cobresal esta tarde ante Santiago Wanderers. Faltando cinco minutos para que finalice el encuentro, el Decano estaba clasificando. En algún momento estuvo 3 a 0 arriba en el marcador global. Pero la perseverancia de los locales torció el destino. Dos goles en el epilogo que los deposita en la definición por el ascenso a primera.

El primer tiempo estuvo repleto de emociones. Ambos equipos, con ideas diferentes para atacar, ofrecieron un gran espectáculo. Por un lado, los Caturros trataban de asociarse más y avanzar en bloque a campo contrario. Se adelantaron en el marcador apenas comenzó el encuentro. Un remate con mucha potencia de Enzo Gutiérrez que se incrustó en el ángulo.

En cambio, los Mineros intentaron un juego directo.  La velocidad de sus extremos y la cancha lenta que frenaba la pelota tentaban a los volantes locales a aprovechar el pase largo. No se desesperaron luego de quedar tempranamente abajo en el resultado, sumado al 0-2 de la ida. Los dirigidos por Gustavo Huerta dieron vuelta el partido con dos golazos. El primero fue un gran tiro Juan Gaete que dejó sin opciones al arquero rival. El segundo, una volea sin ángulo de Ever Cantero que definió como Marco Van Basten al segundo palo.

La segunda mitad fue de menor nivel. Las muchas opciones de gol que se generaron en el primer tiempo disminuyeron notoriamente en el complemento. Cobresal solo necesitaba un gol para llevar la definición a penales. Pero el cuadro Porteño se defendió bien y los pases largos de los Albinaranjas ya no hacían tanto daño. En parte porque la línea de fondo de los dirigidos por Miguel Ramírez ya no se adelantaba tanto.

Los minutos finales fueron dominados por Cobresal mientras la visita se replegaba en propio campo, como reacción inherente para proteger la ventaja. Los pocos espacios obligaron a los locales a lanzar centros al área. En el epilogo del encuentro, convirtieron el tercer gol tras un cabezazo de Cristopher Mesías que les aseguraba los penales. Pero el destino tenía otra sorpresa. Una infantil falta de cerezo en su área fue cobrada como penal por el juez principal. Cantero tuvo la valentía de agarrar la pelota y patear desde los doce pasos.  La pelota entró y el desahogo fue total.  Tremenda remontada de los mineros que nunca se dieron por vencidos y obtuvieron sus recompensas. El cupo a primera lo disputará ante Cobreloa.