Colchagua no baja los brazos. Sigue con sus reclamos por la finalización de la Segunda División, con cuatro fechas aún por disputar, cuando iba segundo, a un punto del líder San Marcos (al que le dieron el ascenso) y un partido pendiente entre ellos. Defiende su derecho a ascender en la justicia ordinaria (hoy vence el plazo de la ANFP para exponer sus descargos ante la Corte de Apelaciones de Rancagua ) y en la deportiva (sostiene que San Marcos no cumplió con los minutos de juveniles). El presidente, Jorge Salazar, insiste en sus desahogos.
¿En qué sustentan su reclamo de los juveniles?
Las bases del torneo son claras y específicas. Nuestro reclamo se apega ciento por ciento a las bases. La regla es tajante al decir que al finalizar el campeonato los juveniles deben tener al menos el 50% de los minutos, algo que lamentablemente Arica no cumple.
¿Qué exigen?
El Tribunal tiene que asumir esto y hacer cumplir las normas. Creemos que tiene sentido y que, con sanciones de por medio, deberíamos nosotros asumir el liderato del torneo.
¿Cuáles son los pasos que seguirán?
Es curioso porque el Tribunal no ha actuado con la premura que debiera. La justicia ordinaria acogió nuestros requerimientos rápidamente, pero el Tribunal de la ANFP no. Es una instancia que hace más de 45 días que no tiene nada que hacer y así y todo no pasa nada con nuestro caso. Me parece sospechoso que no acojan esto para analizarlo. Ahora se fijó una audiencia para el 24 y es Navidad, por lo que seguro no van a sesionar y aplazarán todo para 2020.
¿Qué razones hay en la lentitud del Tribunal?
Sabemos de buena fuente que el presidente del Tribunal es amigo del presidente de Arica. Colchagua, por no tener el lobby suficiente, o por no ser tan parte de este sistema que maneja el fútbol, va a ser postergado. No entiendo realmente por qué nos tramitan, si nuestro reclamo se basa en un principio deportivo. Lo que creo es que nos quieren dilatar para que pase el tiempo y sepultar el tema.
¿Y si el Tribunal no acoge sus reclamos?
Estamos evaluando ir a instancias superiores. Aunque la ANFP ni siquiera nos respondió el requerimiento que hicimos el 2 de diciembre para ir al TAS. Hasta el día de hoy no hay una respuesta. Y ante ese silencio, falta de respeto y planificación, estamos analizando y preparando otro tipo de acciones.
Ya hay una en curso...
Un abogado, por su cuenta, inició una acción ante la justicia ordinaria, en la que se exige que la ANFP explique todo el proceso. Se dieron ocho días de plazo y ese plazo vence mañana (miércoles). De todas maneras, no sabemos si la ANFP va a responder o no. Después de eso será la justicia la que determine si declara una orden de no innovar, lo que significaría que el juez pararía toda la decisión de la ANFP.
¿Está consciente de los riesgos que corre al acudir a la justicia ordinaria?
Es que no nos queda otra si vemos que nadie nos da respuestas. Iremos como club ante la justicia ordinaria, aunque nos han ofrecido las penas del infierno. A nosotros nos miden con otra vara y nos tienen amenazados. Vamos a tomar el riesgo. Es tanto lo que nos han pasado a llevar, es tanta la injusticia, que tomaremos el riesgo.
¿Qué le pasa al ver que la Asociación programó partidos para definir la B y no hizo lo mismo con la Segunda División?
Nosotros no queremos beneficios de ningún tipo. Desde el primer momento planteamos la idea de jugar. Queremos pelear en cancha nuestra opción de subir. Jugamos con General Velásquez el mismo día que se suspendió el fútbol en La Florida. La división podía jugar y, de hecho jugamos. Nosotros queremos jugar. Nuestro principio como club es jugar, no ganar de forma administrativa. El Consejo ni siquiera analizó el caso de la Segunda División. Se decidió por Arica sin ningún análisis. Prueba de ello es que el reglamento no se cumplió. Nombran campeón a un club que no cumplió toda la normativa. La decisión de la ANFP es anárquica, prepotente y lejos de cualquier principio deportivo.