Colo Colo no pudo repetir los primeros 53′ minutos disputados en la Supercopa ante Universidad Católica y empató sin goles ante Unión La Calera en Macul. Los albos, necesitados de alegrías, siguen sin mostrar su mejor cara pese a la nueva temporada y los refuerzos.
El vacío estadio Monumental fue testigo de un primer tiempo disputado, accidentado y entretenido. Con polémicas y ocasiones de gol por igual. Equilibrado en el dominio de los equipos, aunque Unión La Calera disfrutó de más posesión y demostró más claridad a la hora de construir el juego y llegar al arco de Cortés.
El drama que vive Gustavo Quinteros con sus defensas lo obligó a formar la pareja de centrales con Felipe Campos y Daniel Gutiérrez, juvenil que ayer hizo su debut en Primera División. Un poco más arriba, el volante de contención fue Gil, mientras que en el ataque Gaete se ubicó en la punta izquierda; esas fueron las caras nuevas con las que inició el Cacique el Torneo Nacional
Los caleranos, en tanto, estrenaron en la banca a Luca Marcogiuseppe, quien pese a las bajas y salidas en el plantel presentó un once lleno de nombres conocidos y que fueron partícipes de la gran campaña realizada el 2020.
Esa memoria futbolística le permitió a La Calera ser ligeramente superior, pese a que los albos tuvieron la más clara del primer tiempo a los 3′, cuando un rechazo fallido dejó a Costa mano a mano con Martín Arias. El uruguayo-peruano, pese a estar solo, mandó su definición al palo derecho.
De ahí en más, el renacer de Vargas por el centro, la juventud de Oyanedel (reemplazó a Wiemberg) por la izquierda, y la fuerza de Valencia por el mismo flanco; poco a poco hicieron sucumbir a los pupilos de Quinteros. El mediocampo —testigo de intensos duelos entre Gil y Castellani— fue ganado por los cementeros, quienes urdieron buenas jugadas colectivas que, sin embargo, no lograron subir al marcador.
La pesadilla para los albos vino cuando terminaba el primer tiempo. Campos cayó mal y se lesionó uno de los tobillos, lo que llevó a Quinteros a recurrir de Matías Zaldivia, defensor citado de emergencia tras la irresponsabilidad de Falcón, así como por la incapacidad de Blanco y Negro de cerrar el fichaje de Fabricio Formiliano.
El Cacique igualó las acciones en el segundo lapso, aunque sin brillar. Desde la banca removieron por completo al tridente de ataque que poco y nada logró, pero los resultados no fueron muy diferentes. El ingreso de Rodríguez, eso sí, permitió arrebatarle el balón a los rojos, que intentaron contrarrestar con los ingresos de Rivero y Ariel Martínez.
A los 84′, un codazo criminal de Martínez a Fuentes dejó a ULC con uno menos, pero los albos, presos de su falta de claridad, fueron incapaces de sonreír en el inicio de su nueva temporada.