Este Colo Colo de Jorge Almirón, que está vivo en tres competencias distintas, no pierde el tranco. Puede que no brille, que en pasajes de los partidos no juegue bien, o que simplemente no llene las expectativas de los hinchas o del medio. Pero saca resultados y mantiene la ilusión a tope. En ese sentido, no hay nada que reprocharle al entrenador argentino. Este domingo, visitando un territorio históricamente hostil (deportivamente hablando) como Calama, sacó la tarea adelante. Le bastó con un 1-0 para quedarse con los puntos ante Cobreloa y seguir respirándole en la nuca a la U de Gustavo Álvarez.
Con realidades opuestas, fue la reedición de un partido de rica historia, considerado derechamente como un clásico del fútbol criollo. Después de nueve años, se volvió a disputar el choque entre naranjas y albos en el norte del país, por el campeonato de Primera División. El año pasado se enfrentaron por la Copa Chile. Si los intereses del Cacique estaban en mantenerse en la pelea por el título, con la presión de la victoria de su archirrival (1-0 sobre Coquimbo Unido), el afán de los loínos es sumar para alejarse de la zona baja y afirmarse en la máxima categoría, en la temporada del retorno.
Como el calendario es ajustado, Almirón apostó por administrar fuerzas y metió cambios. Al contar con una plantilla numerosa, recurrió a aquello. No estuvo Mauricio Isla; tampoco Marcos Bolados. Fueron al banco Emiliano Amor y Vicente Pizarro. La sorpresa de la formación fue la presencia de Leandro Hernández como puntero por la derecha. Su presencia se explica, en parte, por la necesidad de sumar minutos Sub 21 (complicación para Colo Colo tras la partida de Damián Pizarro). La participación del juvenil no fue influyente en el primer tiempo. De hecho, salió en el entretiempo.
Cobreloa, consciente de sus limitaciones y necesidades, salió a jugar el duelo con actitud, planteando un duelo áspero en la primera parte del juego. Mucha refriega. Aprovechando que la visita tenía ciertas desatenciones, atacó frecuentemente la espalda de los laterales. En los 15′, el elenco de Dalcio Giovagnoli tuvo una chance clarísima para abrir la cuenta, pero inexplicablemente Rodolfo González falló en el área chica, debajo del arco.
En el otro lado, Javier Correa se las arreglaba para generar las opciones más claras del Cacique. En los 7′, el ex Estudiantes de La Plata falló mano a mano ante Nicolás Avellaneda, tras un error en la salida local. Después, en los 31′, el 9 albo sacó un remate que se fue desviado por poco. En un encuentro en el cual ninguno de los dos marcaba una supremacía respecto al adversario, Colo Colo encontró la llave en los 36′.
El mismo Correa asiste a Carlos Palacios, quien saca un disparo de distancia despejado por Avellaneda, pero el rebote del golero va hacia el centro y lo captura Leo Gil. El Colorado se acomoda para definir con la zurda y pone el 1-0 a favor de los colocolinos.
Una de las virtudes del elenco comandado por Almirón es que no requiere de ser un claro dominador para llegar al gol. Además, cuenta con la jerarquía para administrarlo. En la parte complementaria, el ritmo del partido decayó notoriamente. Las imprecisiones le ganaron a las claridades.
Cobreloa lo intentó, pero fue incapaz de generarle un riesgo real a la portería de Cortés. Lo más cercano fue un remate de Nahuel Donadell, en los 73′, que se fue desviado a escasos centímetros del arco. Mientras que Colo Colo tampoco le llegó a Avellaneda. Almirón empezó a hacer cambios, pero no implicó algún arrebato individual para sellar el triunfo o alguna acción colectiva. El segundo tiempo fue muy discreto.
Por lo tanto, Colo Colo no le pierde pisada al líder. Llega a 45 puntos, a cuatro de la U, y con un partido menos (el pendiente contra Huachipato). De paso, se toma revancha de lo sucedido en la primera rueda (parece lejano que Cobreloa ganó en el Monumental este año). El Cacique sigue vivo en tres frentes. ¿Hay algo que reprocharle a Almirón?
Ficha del partido
Cobreloa: N. Avellaneda; N. Palma (88′, Ch. Bravo), B. Tapia, R. González, J. Espejo; L. García, J. Leiva; N. Donadell, M. Borgnino (71′, N. Orrego), P. Romero (46′, B. Valdés); y L. Di Maio (59′, J. Parraguez). DT: D. Giovagnoli.
Colo Colo: B. Cortés; O. Opazo, R. González, M. Falcón (84′, E. Amor), E. Wiemberg; E. Pavez, L. Gil (73′, V. Pizarro); L. Hernández (46′, C. Zavala), C. Palacios (73′, G. Castellani), L. Cepeda; y J. Correa (85′, G. Paiva). DT: J. Almirón.
Goles: 0-1, 36′, Gil, captura rebote de Avellaneda.
Árbitro: J. Cabero. Amonestó a Valdés (COB); Falcón, Opazo, Correa y el DT Almirón (CC).
Estadio Zorros del Desierto. Asistieron 8.812 personas.
En cursiva, jugadores juveniles.