La temporada 2020 ha sido durísima para Colo Colo, tanto en lo futbolístico como en lo institucional. Actualmente es el colista de Torneo Nacional y en los últimos días recibió un golpe, que en Macul ya esperaban, los negativos resultados de los Estados Financieros Intermedios Consolidados, que comprenden el período entre el último trimestre del año pasado y el 30 de septiembre del presente.
Las pérdidas de este informe indican que Blanco y Negro perdió $ 1.575 millones, de los cuales $ 1.507 millones fueron en el trimestre julio-septiembre, lo que se explica mayoritariamente en los dineros adeudados a los jugadores tras ser enviados al Seguro de Cesantía y derechos de imagen y cuotas de pase. Si se compara con sus archirrivales, la U ganó $ 261 millones y la UC perdió $ 504 millones. En el caso de Cruzados, eso sí, tendrá un positivo cuarto trimestre, puesto que en noviembre se informaron las transferencias Kuscevic (€ 1.500.000) y Pinares (US$ 1.500.000), además del premio total por su participación en la Copa Sudamericana.
Lógicamente existe preocupación en los distintos bloques de la concesionaria sobre estos resultados en un año marcado por las limitaciones de la pandemia, lo que significó una fuerte disminución en recaudación, debido a la prohibición de público.
El economista Roberto Darrigrandi, quien en abril analizó para La Tercera el estado financiero del Cacique, hoy repite el ejercicio y su inquietud por su débil salud económica no cambia. “Los números no son buenos y llama la atención la gran cantidad de gastos administrativos. Se echa de menos una gestión más proactiva ante la contingencia. No se nota que se hubiesen apretado el cinturón. Por el contrario, pareciera que funcionaran como si fueran inmunes a la crisis”, dice el ingeniero comercial de la PUC, con menciones en economía y administración de empresas y con un MBA en la Universidad de Chicago.
Otra de las preocupaciones es la disminución del patrimonio. Así, ByN pasó de $ 20.294 millones al 31 de diciembre de 2019 a 18.719 millones al 30 de septiembre de este año. “Si sigue este nivel de pérdidas, se pueden terminar comiendo el patrimonio y eso no es saludable en ningún lado”, advierte el especialista.
Por otro lado, las ventas por publicidad y derechos de televisión también sufrieron una merma en el trimestre julio-septiembre, ya que alcanzaron los $ 1.869 millones, lejos de los $ 2.813 millones del mismo periodo de 2019. No obstante, si se considera todo 2020, los números son mejores que los del año pasado, pues alcanzan $ 9.392 millones, superando los $ 7.135 millones de dicha época. Esto, principalmente, porque el equipo participó en la Copa Libertadores, lo que no pasó en 2019.
Una de las cifras que más ruido hace y refleja el débil momento futbolístico del club, es el escaso ingreso por venta de jugadores. Si entre enero y septiembre de 2019 se recaudaron $ 4.130 millones, este año en el mismo margen de meses, solo ingresaron $ 73 millones.
El informe también detalla los distintos litigios judiciales, civiles y laborales, entre ellos el que mantiene Jorge Valdivia con el club, algo que sorprende a Darrigrandi. “Es muy curioso, porque ninguna empresa contrata a alguien que tiene una demanda en curso”, señala.
Los más pesimistas al interior del club sostienen que Colo Colo puede funcionar hasta marzo con esos recursos. Sin embargo, el economista opta por la cautela: “Puede arreglarse en algo con el contrato con Adidas o alguna venta, pero si no se realiza un plan de ajuste, los problemas seguirán.Y si Colo Colo baja, puede ser peor”.
Todavia hay varios aspectos pendientes, como el del sponsor principal. Por ahora, los interesados ofrecen la mitad de los US$ 2.4 millones que reciben actualmente, algo que también complica a ByN. Este jueves habrá una reunión extraordinaria de directorio para tocar este y otros temas que comprometen el futuro del club.