¿Cómo sobrevivir sin Aránguiz ni Pulgar?: Las opciones de Lasarte para rearmar el mediocampo de la Roja
El puentealtino y el antofagastino son dos de las principales figuras de la Roja. Sin ellos, la estructura en una zona vital del campo de juego se resiente considerablemente. El único titular seguro es Arturo Vidal. Seis cartas lucen sus méritos para quedarse con los otros dos puestos.
El domingo, Charles Aránguiz fue liberado de la convocatoria de la Selección para los duelos frente a Paraguay y Ecuador. A través de un comunicado, la ANFP oficializó la medida, basada en los problemas físicos que experimenta el puentealtino desde mediados de octubre. En Juan Pinto Durán se convencían por fin de la magnitud de la lesión muscular que le afecta en la pierna derecha, que inicialmente pretendían revisar en el búnker de la Roja. El Bayer Leverkusen acompañaba ahora información médica contundente. Chile sufre. La Roja se queda sin uno de los elementos más importantes. Probablemente, el más regular de la Generación Dorada. Martín Lasarte, en tanto, tiene escaso margen para el lamento. A horas del choque en el Defensores del Chaco, el estratega debe enfocarse en llenar ese vacío.
El listado de mediocampistas, aún sin Aránguiz, es amplio. Eso si, a la convocatoria del técnico uruguayo hay que restarle a otro elemento clave: Erick Pulgar. El volante de la Fiorentina está suspendido por acumulación de tarjetas amarillas, por lo que no podrá actuar en Asunción. De ahí que las posibilidades para acompañar a Arturo Vidal, el único fijo en cualquier fórmula empiezan a reducirse. En rigor, los disponibles para los restantes dos puestos en una zona crucial del campo de juego son seis: Tomás Alarcón, Claudio Baeza, Diego Valdés, Pablo Galdames, Marcelino Núñez e Ignacio Saavedra.
Alarcón tiene ventaja
Por funcionalidad, Tomás Alarcón arranca con cierta ventaja. El rancagüino es especialista en el puesto que deja vacante Pulgar y, de hecho, el buen rendimiento que mostró tanto en O’Higgins como en la Sub 20 le permitió dar un paso clave en su carrera: emigrar al Cádiz, de la LaLiga española. Es decir, semana a semana convive y se enfrenta a buena parte de los mejores jugadores del mundo. La última consideración tampoco es casual, porque es públicamente conocido que Lasarte le asigna una relevancia significativa al hecho de los seleccionados compitan en el más alto nivel. Europa es, ciertamente, el parámetro que el estratega ha establecido como ideal.
En la competencia ibérica, el ex jugador celeste suma 822 minutos en 12 encuentros. En nueve de ellos ha sido considerado como titular. Ha recibido cinco amonestaciones y, en general, ha recibido una crítica favorable de parte de la exigente prensa española. En la Roja, eso sí, su protagonismo es menor. En la Copa América sumó apenas 93 minutos en cuatro partidos y en las Eliminatorias registra 15 en dos encuentros: cuatro frente a Argentina y el resto ante Ecuador.
Cerrada batalla
En una segunda línea, Claudio Baeza, Pablo Galdames e Ignacio Saavedra lucen méritos más o menos similares para transformarse en la opción que necesita Lasarte. El jugador del Necaxa también es inamovible en el Toluca, en el que ha jugado 16 duelos, todos como titular. En la Roja, en tanto, registra 380 minutos en siete encuentros. Ante Uruguay, Ecuador y Colombia, en dos oportunidades, fue considerado desde el comienzo. Ha recibido una amonestación. En la Copa América no sumó presencias.
Galdames, en tanto, dio un significativo salto al vincularse al Genoa, de Italia. Antes de eso, había tenido escasa actividad, aunque siguió siendo considerado en la Roja. En la Serie A ha disputado cuatro encuentros, en los que suma 198 minutos. En dos, ante el Empoli y el Venezia, fue titular. Por Chile, en tanto, registra 86 minutos en tres encuentros eliminatorios: frente a Argentina, Venezuela y Ecuador. Ante los abicelestes, Lasarte lo ocupó como titular.
El cruzado Saavedra, en tanto, lleva avalado por su constante participación en la UC. Solo en esta temporada, suma 2.181 minutos en 26 encuentros. Vale decir, es el jugador con más presencias entre los que entran en esta discusión. En su contra, eso sí, conspira su nula experiencia en partidos de Selección a nivel oficial. Solo fue considerado en el amistoso frente a Bolivia, en marzo del año pasado, en el que actuó dos minutos.
Experiencia contra juventud
Más adelante, en una función más mixta, Diego Valdés y Marcelino Núñez deberían pelearse la chance de entrar entre los 11 iniciales. El volante del León llega con el aliciente de la buena imagen que dejó en el triunfo sobre Venezuela, en el que fue la principal sorpresa que determinó Lasarte, precisamente en lugar de Aránguiz, aunque esa vez la motivación era distinta, pues el Príncipe estaba suspendido por haber sido expulsado en el choque ante los guaraníes en San Carlos de Apoquindo. Si bien cuando se supo su designación como titular se multiplicaron las críticas, la convincente actuación que desplegó el mediocampista formado en Audax Italiano las acalló.
Núñez es otra opción potente. Inamovible en la UC de Cristian Paulucci (26 partidos jugados, 22 como titular, seis goles), le ofrece distintas opciones a Lasarte, incluso una que escasea en la Roja: el disparo de media distancia. El seleccionador nacional ya lo empleó en los duelos ante Colombia, Perú y Paraguay. En Lima, de hecho, fue titular. Totaliza 90 minutos en el campo de juego.
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