Racing y Cruzeiro animan la final de la Copa Sudamericana. El equipo de Gustavo Costas, de hecho, pegaba de arranque. Cuando el cronómetro recién marcaba 3 minutos, Gastón Martirena abría la cuenta. Sin embargo, luego de una extensa revisión en el VAR, la conquista fue anulada. Se marcó fuera de juego de Maximiliano Salas. Esta situación provoco la rabia del entrenador. El ex Palestino reclamó airadamente al árbitro uruguayo Esteban Ostojich.
Para fortuna de la Academia, a los 15′, el propio Martirena sí pudo anotar y celebrar. Desde el sector derecho, el extremó centró, (¿o le pegó al arco?). Lo cierto es que el balón se coló en el ángulo y el veterano Cássio no pudo evitar el 1-0. Luego, a los 21′, Adrián Martínez puso el 2-0 para Racing.