Gary Medel disputó cerca de media hora en el empate del Bologna con la Lazio, por 0-0. A pesar de no hacerse daño, el cuadro local y los capitalinos protagonizaron un interesante partido en el Renato Dall’Ara.

El encuentro fue reñido desde su inicio. El conjunto Rossoblù arrancó intenciones claras: ser protagonista. La presión alta y actitud combativa sorprendió a las Águilas, que no pudo desplegar su juego con comodidad debido a la intensidad impuesta por los Petronianos.

Bologna buscó hacer daño con transiciones rápidas y sobre todo con pelotazos profundos a sus extremos. No obstante, poco a poco los Biancocelesti empezaron a tomar protagonismo y el control del balón se dividió. Ambas escuadras se intercambiaron el balón e intentaron generar peligro sobre el arco rival.

El trámite se volvió cada vez más reñido. En ese sentido, el centro del campo se tornó como el escenario ideal para desarrollar férreos duelos. En tanto, el ritmo del partido fue creciendo y, a pesar de no haber peligro en las áreas, se encaminó hacia un entretenido partido.

En el 28′, una gran jugada colectiva pudo significar la apertura de la cuenta. Giorgos Kyriakopoulos centró desde la izquierda y Lewis Ferguson se impuso en el segundo palo. El cabezazo del escocés, que estaba activo y era uno de los mejores del terreno, golpeó en el vertical. La más clara de la primera mitad fue para los pupilos de Thiago Motta, que se quedaron con el grito de gol en la garganta.

Interesante empate

Las ocasiones empezaron a llegar y ambos arqueros comenzaron destacar. Lukasz Skorupski, en Bologna, y Ivan Provedel, en Lazio, agigantaron sus figuras y evitaron la apertura de la cuenta. Se fueron al descanso en tablas. El complemento arrancó con la intensidad que marcó el partido. Ambas escuadras buscaron romper el cero, pero no tuvieron éxito.

A falta de casi media hora, concretamente en el 62′, ingresó Gary Medel. El chileno reemplazó a Jerdy Schouten y se ubicó como centrocampista. El Pitbull, fiel a su estilo, se destacó por su marca férrea. Además, se mostró activo, pidiendo la pelota para ser la primera salida de su equipo. Estuvo atento a los cierres y coberturas, aunque no fue mayormente exigido. En momentos, se retrasó y quedó posicionado como un tercer central, tanto por el centro como por la zona izquierda de la zaga.

No se hicieron daño y finalmente el duelo terminó en tablas. Con este empate, el Bologna alcanzó los 36 puntos y quedó a seis del Atalanta, último clasificado a torneos internacionales.

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