Jordhy Thompson se aferra a la fe. El volante de Colo Colo está esperando la resolución de la justicia para aceptar una oferta del fútbol ruso. El Orenburg, de la Primera División de ese país, aceptó las condiciones que planteó el Cacique para un préstamo con opción de compra. Está dispuesto a abonar los US$ 300 mil que cuesta la cesión. Y también a ejercer la prerrogativa para quedarse con su pase.
Antes que todo eso pase, el antofagastino tiene que recibir una autorización clave: la justicia tiene que autorizarle a salir del país. En el marco de la formalización por la agresión a su pareja, Camila Sepúlveda, la Corte de Apelaciones le cambió la medida cautelar de prisión preventiva por las de arraigo nacional y arresto domiciliario parcial. Ambas complican su traspaso a un club extranjero, una de las estrategias que había definido el entorno del jugador, con la anuencia del Cacique, en el afán de rescatarle. Su caso, ciertamente, produjo divisiones en Blanco y Negro entre quienes pretendían sacarle del club, como el actual timonel, Alfredo Stöhwing, y quienes optaban por buscar una fórmula más armoniosa, que apuntara a rescatarlo en el plano personal, considerando que se había formado en la institución de Macul. En esta postura, se inscribió, por ejemplo, Aníbal Mosa, ex presidente de la concesionaria.
El mensaje
El mensaje que publica Jordhy Thompson en una historia en Instagram, es, por un lado, una expresión de deseo. “Con muchas ganas de volver a las canchas”, dice. Está claro que en Colo Colo no podrá hacerlo, pues el club determinó que no volverá a utilizarlo. También hay palabras de gratitud. “Agradecido de todas las personas que me han brindado su apoyo”, plantea.
Finalmente, termina siendo un acto de esperanza. “Con la fe en Dios”, plantea, a modo de conclusión, aludiendo al buen desenlace de las gestiones que sus abogados realizan para, en definitiva, poder sacarle del país.
La barrera
La barrera judicial es difícil, pero no imposible de sobrepasar. Depende, naturalmente, de la voluntad del jue que tenga que resolverla. El problema para Thompson es que su caso tiene tanta resonancia que hasta ha generado reacciones a nivel gubernamental.
De hecho, la ministra Antonia Orellana, titular de la cartera de la Mujer y la Equidad de Género, ha sido enfática respecto de la imposibilidad de que Thompson abandone Chile. “Aunque sea el Real Madrid, no puede salir del país”, puntualizó hace algunos días, cuando se conoció la oferta del equipo europeo. Las graves situaciones que ha protagonizado, que revisten el carácter de delito y que incluso le llevaron al penal Santiago I a cumplir prisión preventiva, han transformado el caso del futbolista en paradigmático respecto de la lucha contra la violencia de género.
Colo Colo, en tanto, busca cautelar sus intereses económicos en torno al jugador. En ese contexto, Blanco y Negro decidió extender en un año la relación contractual con el futbolista. Ese mecanismo le permite a la concesionaria alba disponer del futbolista al retorno de Europa o negociar su pase. De no alargar el contrato, Thompson habría quedado libre después del préstamo.