Constanza Minoletti cumple un rol clave en la ANFP: es la subgerente del Fútbol Femenino, un cargo que en los últimos años ha adquirido una creciente connotación. Desde esta función, relata algunos avances en la disciplina en los últimos años y también valora la conmemoración de este 8 de marzo. Si bien comenta que no participará alguna de las tantas convocatorias llamadas para esta fecha, explica que tendrá un activa función a través de su puesto. “Vamos a participar en algunos actos. Incluso, un par de clubes nos invitó para acompañarlos y además tendremos varias actividades internas. Para nosotros es una fecha muy importante”, sostiene.
¿Cuál es el balance del comienzo de esta nueva temporada del fútbol femenino?
Es muy positivo, porque hemos ido avanzando. Cada vez los clubes están más comprometidos y desde el punto de vista sanitario tampoco tuvimos algún problema al respecto. Nunca desde que regresó el fútbol hemos tenido que suspender un partido o hemos tenido algún caso positivo. Esperamos que sigamos en la misma línea que en 2020 y 2021.
No todos los clubes han ofrecido las mejores condiciones a sus jugadoras. ¿Cómo enfrentan ese tipo de situaciones?
Los clubes poco a poco se han ido preocupando de dar mejores condiciones a las jugadoras para que se puedan ir desarrollando. Este es un camino largo, pero lo bueno es que cada vez hay más conciencia sobre esto. Por ejemplo, en la prevención del Covid el tema es más complejo porque la mayoría de las jugadoras tiene otros trabajos y se mueve en transporte público, por lo que es más difícil la prevención, y aun así no hemos tenido ningún problema gracias a la seriedad con que se ha tratado el tema.
Usted habla de que las jugadoras tienen otros trabajos y deben andar en transporte público. Eso en el fútbol masculino no pasa. ¿Qué le provoca tanta desigualdad?
Lo que pasa es que el fútbol masculino se demoró más de 100 años en conseguir estas condiciones, sueldos millonarios y otros beneficios. Sin embargo, en el femenino podríamos decir que en los últimos 20 años hemos conseguido lo que el masculino logró en 80. Sabemos que es un largo camino todavía, pero sentimos que hay mayor conciencia y compromiso para ir mejorando la actividad.
En el Congreso avanza un proyecto de ley sobre la profesionalización del fútbol femenino. ¿Qué opinión tiene de esta iniciativa?
Nosotros fuimos los primeros en alentar la profesionalización del fútbol femenino, más allá de la existencia de una ley o de un proyecto de ley. Creemos que se tiene que avanzar paso a paso en esto, y ya los clubes están implementándolo. A nosotros nos interesa mucho, porque, entre otras cosas, ayuda de la mejor forma a que podamos ir proveyendo jugadoras a las distintas selecciones.
Pero es posible que la ley se apruebe mucho antes y no coincidan con los tiempos que ustedes proponen. ¿Cómo lo harán ahí?
Efectivamente, podría suceder, pero nosotros tenemos confianza en que cualquier cambio se tiene que ir conversando e implementando en conjunto. Y estamos seguros de que vamos a tener las instancias para tratarlo.
¿El que Alexandra Benado, la nueva ministra del Deporte, haya sido futbolista ayuda en la relación con la ANFP?
Sí. De todas maneras. Si bien la realidad del fútbol femenino es distinta a la de 2008, 2009, 2010, que son los años en que se inició todo y en la época en que ella dejó de jugar, creemos que va a saber reconocer los avances que ha tenido el femenino y los puntos donde estamos mejorando. Tampoco queremos molestarla tanto, porque también hay otras federaciones que tienen sus necesidades. Además, también hay que reconocer a la ministra Cecilia Pérez, que tuvo un rol muy importante ayudándonos con la tramitación de los permisos para volver a jugar.
Como mujer, ¿cómo es estar inmersa en el mundo del fútbol, que aún sigue dominado por los hombres?
Lo primero que me gustaría decir es que el fútbol femenino involucra a muchas mujeres. No solo las jugadoras, sino que también hay entrenadoras, árbitras y personal que trabaja en otras áreas. Y más allá del género, siempre es un gran desafío, y lo más importante es poder hacerlo bien y apuntar a que nuestro deporte siga funcionando.
¿Qué reflexión hace en este 8 de marzo?
Para este 8 de marzo, día de especial importancia para la ANFP, pero estratégicamente importante para nuestra área, nuestros principales deseos de conmemoración son para el esfuerzo de nuestras jugadoras, que han tenido un comportamiento y una responsabilidad impecable en el desafío de mantener la organización y los estándares necesarios, lo que no es fácil. Felicitarlas por eso, alabarlas por eso; conmemorar su esfuerzo y dedicación y, a la vez, imponerles el desafío y la responsabilidad de no decaer, de no bajar los brazos y hacer que este Campeonato Femenino de Primera División 2022 sea tanto o más exitoso que el que fue en 2021.