Un nuevo giro se está produciendo en la polémica de Novak Djokovic. Esta vez, las autoridades australianas están investigando eventuales contradicciones en el relato del número 1 del ranking ATP. De comprobarse los hechos, Nole podría sufrir la cancelación de su visa y la deportación de Australia. Todo esto luego de que este lunes el tribunal fallase en su favor.
En su declaración jurada, el serbio afirmó no haber visitado ningún otro país en las dos semanas previas a su viaje a Melbourne. En la interrogación que le realizaron luego de aterrizar, el tenista aseguró que la ficha fue llenada por su agente, aunque en ese momento no se le preguntó sobre sus últimos traslados.
El problema para Nole recae en sus publicaciones en redes sociales, donde se muestra que pasó los días 25 y 26 de diciembre en Belgrado, siendo que su salida al país oceánico se dio desde España, el 4 de enero.
A la espera, nuevamente
Las leyes australianas establecen que ofrecer información falsa en la declaración jurada es un delito grave. En caso de comprobarse la infracción, Novak Djokovic no podrá disputar el Australia Open, todo un lío para el deportista quien se encuentra en Melbourne, en libertad, preparando su participación en la competencia, pero con este nuevo problema encima.
No han sido días tranquilos para el serbio, quien espera una resolución que podría definir su futuro. La determinación debe ser tomada por Alex Hawke, el ministro de Inmigración, que, según trascendió en la prensa australiana, anunciaría su decisión el miércoles 12 de enero.
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