Se acabó el suspenso. La final de la Copa Libertadores de América 2019 no se jugará en Santiago. La Conmebol decidió cancelar el partido en la capital, producto del estallido social que vive el país desde el 18 de octubre. Para la Confederación Sudamericana de Fútbol no están dadas las condiciones de seguridad en Chile para la definición entre River y Flamengo, duelo que estaba fijado para el 23 de noviembre, en el Estadio Nacional.
La determinación se tomó ayer por la tarde, tras una reunión celebrada en Asunción, en la que participaron el presidente de la entidad regional, Alejandro Domínguez; el timonel de la ANFP, Sebastián Moreno; el titular de la AFA, Claudio Tapia; el mandamás de CBF, Rogerio Caboclo; y las máximas autoridades del cuadro millonario y carioca, Rodolfo D'Onofrio y Rodolfo Landim, respectivamente.
En la cita se analizaron diversos factores, pero el que primó fue la seguridad. En ese ítem, Santiago perdió muchos puntos debido a las jornadas de protestas que se han realizado, prácticamente, todos los días desde que comenzó la movilización.
Eso, pese a que la ministra de Deportes, Cecilia Pérez, aseguró la semana pasada que estaban dadas las condiciones para albergar el encuentro entre argentinos y brasileños, en Ñuñoa. "Recibí el llamado del presidente de Conmebol y le he ratificado, a nombre del presidente Piñera, nuestra firme voluntad y compromiso de realizar la final de la Copa Libertadores en nuestro país. Es una de las tantas fiestas que le hace bien al país. Vamos a estar trabajando en conjunto con el ministerio del Interior", sostuvo.
Aun cuando la confederación celebró públicamente las palabras de la exvocera de Gobierno, la inquietud se mantenía en Paraguay. Esto, porque los informes del equipo de coordinación que estaba en Chile hace varios días no eran positivos. Para colmo, el Torneo Nacional ya llevaba tres fechas de suspensión y no se vislumbraba un retorno pronto.
Por eso, cuando faltaban ocho minutos para las 20 horas de ayer, la Conmebol oficializó, a través de su cuenta de Twitter, lo que ya era un secreto a voces: la final de la Copa Libertadores no sería en Santiago, sino que en Lima.
La entidad explicó las razones del cambio de sede en un comunicado: "Nuevas circunstancias de fuerza mayor y orden público, analizadas y evaluadas con prudencia, considerando la seguridad de los jugadores, del público y de las delegaciones, motivaron la decisión de llevar la final de la Copa Conmebol Libertadores 2019 a Lima, Perú, y mantener la fecha del 23 de noviembre".
"Conmebol agradece vivamente al gobierno de Chile la activa colaboración que prestaron las diversas reparticiones públicas para la correcta organización de la Final Única de la Conmebol Libertadores 2019. Deseamos al pueblo chileno y sus autoridades paz y buena voluntad", cerró el escrito.
Posteriormente, en conferencia de prensa, Domínguez reveló que conversó con la titular de la cartera de Deportes del Gobierno de Sebastián Piñera: "En función de haber hablado con la ministra Cecilia Pérez, hemos tomado la decisión, en consenso, de cambiar la final única a Lima, Perú".
"Consenso hubo, rápido no fue. Venimos trabajando en una ciudad hace más de un año (...) En este momento no hay estadio definido. Tenemos dos escenarios: el Monumental y el Nacional", prosiguió.
Ya es un hecho. La primera final única de la Copa Libertadores no será en Santiago. Eso sí, como efecto colateral, la ANFP podrá programar competencias locales para el sábado 23.