Este domingo, el Barcelona abre la temporada de manera oficial con la Supercopa de España, enfrentando al Sevilla en Tánger (Marruecos). Una de las situaciones que altera la planificación del técnico Ernesto Valverde es la cantidad de extracomunitarios que tiene en su plantel. Hoy, tiene seis jugadores en esa condición, aunque será reducida a cuatro porque los defensores Yerry Mina y Marlon no están en los planes del entrenador, por lo tanto están en vías de salida.
Con ese panorama, son cuatro los futbolistas azulgrana que son, hasta el día de hoy, extracomunitarios: los brasileños Philippe Coutinho, Arthur, Malcom y el chileno Arturo Vidal. El problema radica en que el reglamento indica que solo se pueden inscribir a tres en la Liga de Fútbol Profesional (LFP). El Barcelona trabaja contra el tiempo para conseguir la nacionalidad portuguesa de Coutinho (porque su esposa tiene esa nacionalidad) antes de la Supercopa del domingo, para así liberar un cupo.
La legislación en Portugal exige para obtener la nacionalidad lusa que, al menos, uno de los dos miembros de la pareja tenga pasaporte portugués y que lleven un mínimo de tres años de matrimonio. El diario Sport constata que el jugador brasileño ya presentó al consulado la documentación correspondiente y los trámites están avanzados. No obstante, el tiempo se acaba.
Mientras no se normalice de aquí al día del partido, Valverde tendrá que descartar a uno de los jugadores que reforzaron ahora al plantel: Arthur, Malcom o Vidal. Y considerando que el chileno lleva recién dos días trabajando con sus compañeros y no estuvo en la pretemporada en Estados Unidos, es el más posible descartado para la Supercopa si no se soluciona a tiempo lo de Coutinho.