Cobreloa no deja de sufrir durante las últimas semanas. Este lunes se confirmó la salida de Dalcio Giovagnoli de la banca loina. El entrenador fue cesado de su cargo luego de la derrota que sufrieron ante Everton, en Viña del Mar. Parte luego de haber dirigido 17 partidos, con cinco triunfos, dos empates y 10 derrotas. Actualmente, el elenco de Calama es penúltimo, con 24 unidades, solo una más que Deportes Copiapó, su próximo rival.

“Durante esta semana asume César Bravo como director técnico, Víctor González, ayudante técnico y como preparador físico Jonathan Cisternas”, informaron desde el ente nortino. Este lunes comenzaron los trabajos del plantel naranja a cargo del nuevo estratega. Los próximos desafíos del elenco de la Región de Antofagasta son recibir al cuadro atacameño, visitar a Deportes Iquique, enfrentar a la UC en el Zorros del Desierto y cierran ante O’Higgins, en Rancagua. Será el cuarto interinato de Tomate en Cobreloa. Antes los dirigió en 2014, 2016 y 2017. Luego tuvo pasos por Trasandino de Los Andes y Unión Española.

Días antes de confirmar su salida, Giovagnoli había dejado la puerta abierta a una eventual negociación y reveló la situación financiera de Cobreloa. “No queremos ser un obstáculo ni mucho menos, acá no venimos por una cuestión económica. Voy a ser sincero, tal vez fue uno de los contratos más bajos que hemos arreglado en toda nuestra carrera. Nunca nos hemos atado a un contrato y más en una instancia como la que estamos, estamos disponibles, queremos lo mejor para la institución y eso se hablará con la dirigencia”, contó.

Suman negativas

El cambio de entrenador se da en medio de una crisis institucional que ha golpeado al elenco calameño por todo el 2024. En la cancha, suman cuatro derrotas al hilo, ante Colo Colo, Audax Italiano, Ñublense y Everton. Su última victoria fue el 27 de agosto, ante Coquimbo Unido. Además, hace dos semanas, despidieron a Mario Sandoval, luego de que el volante estuviera involucrado en un accidente de tránsito en La Pintana, que terminó con cinco personas lesionadas.

Según lo expuesto por el Ministerio Público, el mediocampista se dio a la fuga tras el choque y no informó la situación. El alcotest constató que llevaba 0,51 gramos de alcohol por litro de sangre. Ante esto, el tribunal estableció como medidas cautelares la privación de libertad en forma parcial en su domicilio, firma semanal, arraigo nacional y la suspensión provisoria de su licencia con un plazo de 120 días de investigación.

Junto a eso, luego de la caída ante los chillanejos, hubo enfrentamientos entre miembros del plantel y un grupo de aficionados, en las inmediaciones del estadio calameño. La situación tuvo que ser contenida por personal de Carabineros. En ese mismo partido frente a Ñublense se vivió otra situación grave en las tribunas. El técnico chillanejo, Mario Salas, recibió un proyectil desde las gradas. El estratega cayó al piso producto del impacto.