La molestia era evidente en el rostro de Cristiano. Portugal acababa de ser eliminada por Uruguay en los octavos de final de la Copa del Mundo y la decepción era enorme en el delantero. El líder futbolístico del vigente campeón de Europa tuvo una mala tarde ante los charrúas y pudo hacer poco para evitar la caída 2-1.
Después de la derrota, el del Real Madrid evitó proyectar el devenir del equipo y, por el contrario, jugó al misterio. "No es momento para hablar del futuro. Ni del técnico, ni de los jugadores, ni del ciclo de la selección. Estoy seguro, eso sí, que Portugal seguirá siendo uno de los mejores equipos del mundo, con grandes jugadores", comentó. "Hay un grupo joven y con una ambición enorme para triunfar", añadió.
"Me gusta trabajar duro para que las cosas salgan bien. Y me voy contento del Mundial. Las cosas no salieron como queríamos, pero este ha sido un gran torneo", expresó también, destacando el nivel de los partidos, la afluencia del público y la seguridad. "Nos vamos con la cabeza en alto. Sé que Portugal seguirá ganando cosas", puntualizó.
Finalmente, dijo que a pesar de la eliminación nadie puede cuestionarse nada. "Jugamos mejor que el rival, pero esto es fútbol. No hay que lamentarse. El que marca más goles gana. Destaco la labor de mis compañeros. Lo hicimos todo. He disfrutado mucho del Mundial y estoy orgulloso de haber estado acá y ser el capitán", finalizó.
