Hace una semana Cristóbal del Solar (30 años) hizo historia. Los 57 golpes que conectó en la primera jornada del Colombia Championship se transformaron en la ronda más baja en un evento patrocinado por el PGA Tour. El hito repercutió en todo el planeta, quien no veía una tarjeta con esos números desde que en 2019 David Carey logró lo mismo en el Cervino Open del Alps Tour, un circuito europeo de tercera categoría.
Pese a que no consiguió el título en Bogotá, quedará para siempre en los registros del golf profesional. Momento único, que aborda con El Deportivo. Cuenta los detalles de ese jueves soñado y su ilusión de ascender en el Korn Ferry Tour tras su segundo año en el circuito. También aprovecha de hablar del golf nacional y sus ambiciones, justo cuando se prepara para disputar en marzo el Chile Classic, torneo más importante del país y donde será el jugador estelar. Eso sí, antes de aquello estará en el México Open, evento del PGA donde acaba de recibir una invitación.
Ronda de 57 para comenzar en Bogotá, ¿cómo fue viviendo esa jornada dentro de la cancha?
Fue un día increíble. La verdad es que uno no sabe cuándo va a hacer un score así o cuándo no. Entonces estaba tratando de jugar hoyo por hoyo. Las condiciones de la cancha estaban perfectas para poder hacer un score así, entonces, básicamente era tratar de empujar lo más posible, tirar drive cerca de green. Afortunadamente en los 18 hoyos me di muy buenas chances y metí varios putts.
¿Cambió su estatus dentro del torneo después del hito?
Definitivamente. Los medios estaban 100% encima mío de ahí en adelante. Todos los días me siguieron muchos fans. La prensa de Colombia también me estaba tratando de entrevistar, preguntar y seguir más que nada. Pero sí, por el lado de prensa se me acercaron mucho y por el lado golfístico también.
La temporada recién comienza para ya va 10 en el ranking, ¿este es el año para subir al PGA?
Obviamente mi meta es entrar al PGA y ser de los mejores del mundo. Ojalá que sea este año, pero al final eso no es en lo que me estoy enfocando. Yo me trato de enfocar en torneo a torneo. Me trato de desconectar de la meta anual, eso me gustaría que fuese más un resultado de lo que yo hago torneo a torneo. Tengo mi meta anual, pero no es algo en lo que me esté fijando siempre. Pero de todas formas, ojalá este sea el año en que subamos y cumpla mi sueño de jugar en el PGA Tour.
¿Qué ha cambiado comparado con el año pasado?
Absolutamente nada. Sigo trabajando de la misma forma con mis entrenadores, Eduardo Miquel en la parte técnica del golf, Eugenio Lizama en la parte mental y Ken McDonald en la parte física. Yo creo que venimos haciendo las cosas muy bien en los últimos años, entonces no te voy a decir que ha cambiado algo, creo que quizás es una evolución de mi juego. Estamos haciendo las cosas muy bien.
Ahora viene el Chile Classic, ¿lo toma como una revancha después de no haber pasado el corte en 2023?
Me gustaría jugar bien en mi país, donde está mi familia y mis amigos. Ojalá, pero como te digo, me trato de enfocar torneo a torneo. No hay más importancia porque sea en Chile, en Estados Unidos o en Panamá. Voy a hacer exactamente lo mismo que hago en todos los torneos, prepararme lo mejor que pueda y hacer mi rutina semanal. Ojalá que sea un torneo excelente. Eso más que nada.
Agustín Errazuriz, Tomás Gana, Gabriel Morgan y Matías Domínguez también estarán en el torneo, ¿cómo ve a esta generación joven que busca un espacio en los circuitos más importantes?
Soy amigo de todos ellos, así que nos llevamos muy bien. Ojalá a todos se les de la oportunidad de seguir mejorando para seguir subiendo el nivel. Como te digo, tienen el nivel para hacerlo. Esto es una maratón, no una carrera corta, sí que hay que ir cada uno con su proceso y esperar que dé frutos.