La goleada 3-0 de Curicó Unido no fue más que el corolario del mal torneo que fraguó Santiago Wanderers, el primer descendido en este 2021. Un resultado que trajo consigo una serie de cambios en la tabla, donde hoy la Universidad de Chile debería jugar la promoción con un cuadro de la Primera B.

El complicado momento de los caturros estuvo omnipresente en el duelo en Playa Ancha. No sólo por la polémica decisión de jugar con una mayoría de jugadores juveniles, sino también con el empeño de la nueva directiva de dejar afuera a varios de los referentes del cuadro verde, además de la salida del técnico Emiliano Astorga, con la posterior nominación de Moisés Villarroel, quien duró algunas horas par dejar el puesto de Jorge Garcés.

Porque hay que ser honestos. Pese al empeño del remendado cuadro porteño, el partido en Valaparaíso se jugó más con el corazón que con otra cosa. Al menos en el primer tiempo, cuando el pundonor de los locales no bastó para salir del cero.

Al otro lado, el elenco de la franja demostró por qué es uno de los equipos que lucha por no descender. Sin mucha organización, pero con un juego basado en balones detenidos para complicar a un equipo verde que, prácticamente, estaba en el suelo.

De esa manera llegó el primer tanto de los curicanos. Una mala salida del meta Christian Fuentes dejó la pelota en los pies de José Rojas. El Pepe vio el arco sin resistencia y puso un derechazo perfecto para el 1-0, a dos minutos del descanso.

La U en promoción

El tanto del ex zaguero azul dejó cambios importantes en la tabla de posiciones. No sólo el descenso definitivo de los caturros. Porque, además, con ese triunfo parcial, el equipo albirrojo sumaba 34 puntos, los mismo que Universidad de Chile, equipo al que condenaba al menos momentáneamente a jugar la promoción.

Ambas escuadras con una diferencia de -4 goles, pero los sureños con una mayor cantidad de tantos convertidos: 37 contra 35 de los universitarios.

Una condición que no hizo más que confirmarse con el segundo tanto de los visitantes. A los 56 minutos, Yerko Leiva marcó el 2-0 con remate ajustado que mejoraba la diferencia de goles de Curicó, que ahora hundía un poco más a los azules.

El tercero, un golazo de Gabriel Harding a los 83 minutos, fue demasiado castigo para los locales que la próxima temporada jugarán en la segunda categoría. Un tanto que volvió a poner en aprietos a la Universidad de Chile, equipo al que le quedan tres duelos: el lunes recibe a O’Higgins, después visita a Cobresal y termina como local ante Unión La Calera.

Curicó Unido, en tanto, recibe a Colo Colo y Palestino en duelos sucesivos, para terminar la campaña regular en casa de Audax Italiano.

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