El comentario lo hizo un cliente entrando a las oficinas de Float Chile: "Por fin en Santiago". Fue justo cuando salía Isidora Jiménez. La atleta llegó para probar un sistema de recuperación que le habían recomendado sus amigos, deportistas y exdeportistas. "No lo conocía y quedé feliz", dice ella. Se espera que en el futuro cercano sean más los especialistas de alto rendimiento que lo utilicen.

Porque Isi no es la única. Es uno de los secretos de Stephen Curry. El basquetbolista de Golden State asiste a un centro de flotación en San Francisco. Es "la fuente de la juventud", como le llama el estadounidense. Al jugador de fútbol americano Tom Brady le gustó tanto, que ya tiene uno en su casa.

Curry se acercó al sistema cuando comenzó a sufrir lo que el resto de los jugadores de la NBA: la falta de sueño. Los partidos en noches seguidas y los constantes viajes le estaban pasando la cuenta. "Con las sales de Epsom y el magnesio que hay en esos tanques te ayudan con la recuperación y relajo de tus músculos y cosas como esa. Además, está la privación de sentidos, es uno de los pocos lugares en donde puedes realmente desenchufarte de la vida diaria", señaló hace algún tiempo Curry en una entrevista.

El basquetbolista resume muy bien el sistema que existe hace un tiempo en el centro de Santiago, pero que por primera vez como un centro dedicado exclusivamente a la flotación instaló hace pocos días el exatleta François Pouzet, en Avenida Kennedy cerca de Gerónimo de Alderete.

Es un estanque de 600 litros de agua con 350 kilos de sales de Epsom (sulfato de magnesio), que hacen flotar a quien entre en la cápsula. Allí puede pasar una hora, en completa oscuridad y silencio, si así lo quiere, pues también hay tinas abiertas y música, si se desea.

Pouzet explica que "las cámaras de aislamiento sensorial es un espacio para que la gente pueda desconectarse de todo. Los beneficios se resumen en mayor relajacion, menor estrés y ansiedad, reparación de los ciclos de sueño, como el jet lag, y alivios de dolores producidos por fibromialgia, artrosis".

Relajarse es el principal objetivo del sistema. Sin embargo, en deportistas de alto rendimiento, los beneficios se multiplican. "Las sales de Epsom se absorben en la piel y naturalmente relaja el cuerpo. Pero también está la visualización. En este espacio, al desconectarse de los estímulos y crear un estado de foco es clave para visualizar. Está científicamente comprobado que si uno visualiza la ejecución técnica de un movimiento se activan las mismas zonas del cerebro y cuando lo haga ya está programado", agrega Pouzet.

La lista de deportistas que supo del sistema y que ya ha visitado las instalaciones, además de Jiménez, se incrementa cada día: Fernanda Mackenna, Natalia Duco, Martina Castro, Enrique Polanco, Daniel Pineda, Tomás González y Francisca Crovetto.

Pouzet asegura que las labores de apertura no le han permitido comenzar la siguiente etapa, "que sería iniciar contactos con el Comité Olímpico, el Paralímpico o el Team Chile, así como con las federaciones, para generar alguna alianza, ver la forma de poder trabajar juntos. Esto es bueno para cualquier persona y espectacular para deportistas".

¿Cómo fue la experiencia? Isi Jiménez dice que "no sabía que existía, es una fuente de recuperación muy buena. A veces una toma una tina caliente para relajar, pero al otro día no se entrena bien, pero esto es distinto, podría haber entrenado bien al otro día. Esa noche no me costó nada dormirme".

La hockista Constanza Palma agrega: "Viví una mañana distinta, algo que nunca había hecho pero, la verdad, superó mis expectativas. Me sentí como si estuviera en el espacio, uno deja de sentir el agua y se siente flotando en la nada. Me sirvió para pensar, reflexionar, conectarme conmigo misma y, al mismo tiempo, relajarme. Increíble experiencia".

Ambas, dicen, volverán.