El declive de la generación dorada
De los elogios y la trascendencia, a la resignación y el rol secundario. Pilares de la Selección bicampeona de América atraviesan por un bajo momento, con una disminución evidente de su contribución en los clubes en comparación con otros años. El brillo se apaga.
Martes 18 de septiembre. Camp Nou. El Barcelona se estrena por la fase de grupos de la Liga de Campeones con una goleada sobre el PSV, bajo la batuta de Lionel Messi, su factor diferenciador. ¿Y Arturo Vidal? Jugó solo los últimos cinco minutos, entrando cuando la victoria no corría peligro. Fue el debut en una ronda de grupos con menor cantidad de tiempo en cancha para el Rey, uno acostumbrado a batallas más intensas.
Miércoles 19 de septiembre. Stade de Suisse, Berna. El Manchester United partió el camino hacia la Orejona con una clara victoria sobre el Young Boys. ¿Y Alexis Sánchez? Se quedó en la banca, relegado por José Mourinho, quien prefirió utilizar a otros delanteros pese a que públicamente ha dicho que el tocopillano es uno de sus principales elementos. Una de las razones que se esgrimió para eso fue cuidarlo de alguna molestia que le podría haber provocado la cancha sintética de los suizos. Volvió el sábado ante Wolverhampton, pero no trascendió en el juego y fue reemplazado tras poco más de una hora de compromiso.
Las dos figuras consulares del fútbol chileno no disfrutan de un presente de esplendor. Ambos han manifestado el anhelo de ganar el trofeo de clubes más relevante del planeta, pero la edición 2018-2019 la comenzaron con un minúsculo protagonismo. El momento de los nacionales inmersos en la élite, los pilares de la Roja, esa misma que llenó de gloria a un país con 100 años de frustraciones, se distancia mucho del clímax que gozaron hace unos años. Si eso se une a que varios de sus compañeros de la Selección transitan por rutas similares, el fenómeno apunta a que la denominada generación dorada, el plantel más exitoso de la historia chilena, no tiene el mismo brillo que encandiló al orbe. Del protagonismo al rol secundario. Por si fuera poco, teniendo que ver el Mundial por TV.
El fichaje de Arturo Vidal por el Barcelona fue un golpe, porque se trató de una transferencia accesible para las arcas catalanas (20 millones de euros) y se hizo rápido. La expectativa se disparó para ver al ex Colo Colo con la camiseta azulgrana, no obstante, pese a las ganas que derrocha por resaltar en la Ciudad Condal, su proceso dentro del régimen culé va a paso lento. Quizás demasiado para lo que él mismo espera. Recién ayer, ante el Girona, jugó su primer partido oficial desde el arranque tras siete presentaciones. Con el Barça, tiene 118 minutos.
El factor "lesiones" también es un motivo de inquietud en Barcelona, por la larga inactividad que tuvo el jugador en el año, desde su lesión en la rodilla derecha ocurrida el 3 de abril, por el Bayern Múnich. En Marruecos, por la Supercopa española, jugó su primer cotejo en 131 días. En 2018, solo tiene 1.198 minutos disputados en 22 partidos (ver infografía).
Alexis Sánchez ha tenido un tránsito poco expedito en el Manchester United, un gigante que quiere volver a ser el que fue. En enero se hizo el fichaje y el tocopillano se erigió como el mejor pagado de la Premier, sin embargo no ha reeditado la relevancia que adquirió durante su paso por el Arsenal. El estilo de Mourinho lo hace jugar más alejado del área y también preocuparse de labores de repliegue. Es cosa de revisar que perdió poder de gol en los Diablos Rojos. En el año calendario ha convertido solo tres veces. Si lo comparamos con años anteriores, la cifra es triste e inquietante. Tanto en 2016 como en 2017 hizo 27, entre el Arsenal y la Roja.
Quien conoce bien a ambos es José Sulantay, uno de los gestores de la laureada generación, técnico de la Sub 20 tercera en Canadá 2007. "Todo en la vida nace, crece y muere. En el fútbol es igual. Cuando uno parte jugando puede llegar a grandes niveles y luego baja, es como un artista. Hay que tener una fortaleza tremenda no solo en el triunfo, que ha tenido la mayoría de estos jugadores. Después de los 30, el más inteligente alarga su carrera", afirma el estratega para La Tercera desde Coquimbo.
"En el caso de Alexis, no está cómodo en un fútbol como el que tiene el United, no le viene a él. Es de mucho contraataque, se lo saltan, y cuando no tiene la pelota se siente incómodo. Con Vidal, las lesiones pueden acortar su carrera. Tiene un físico extraordinario pero abusó de eso y antes de tiempo ya estaba jugando. Siempre ha sido un referente, con una parte psicológica fuerte, una personalidad fuera de lo común, pero a veces eso no alcanza. Ahora tiene que pelear con jugadores de primer nivel", añade Sulantay.
¿Y el resto?
Este alejamiento de la vanguardia también afecta a otros insignes, como Claudio Bravo. El arquero con más presencias en la Roja está en etapa de recuperación luego de la rotura del tendón de Aquiles izquierdo que sufrió durante un entrenamiento en el City. El punto es que antes de aquello ya estaba relegado por el brasileño Ederson. En 2018 apenas disputó 10 partidos (900 minutos). La temporada pasada fue la de peor continuidad para el de Viluco en la primera división europea, con 12 encuentros jugados. Además, su alejamiento de la escuadra nacional con la conocida y polémica distancia con Vidal, llena de interrogantes su futuro próximo.
Charles Aránguiz, pieza vital en el equipo bicampeón de América, ha sufrido con el rigor de las lesiones, que no le permiten aferrarse a una mayor continuidad en el Bayer Leverkusen. Tanto así que sendas molestias de rodilla y en el tendón de Aquiles derecho le impidieron tener actividad normal en la pretemporada de su club. En el año solo acumula 1.711 minutos, lejos de los 3.263 que sumó en 2016, cuando Chile ganó la segunda Copa y el plantel estaba a tope.
Y así, los ejemplos suman y siguen. Mauricio Isla también ha rebajado su continuidad en el fútbol turco, una competencia de segundo orden en Europa, la misma que recibió a Gary Medel, luego de pasar por España, Inglaterra e Italia. Si Gonzalo Jara retornó a la liga chilena y ha sido foco de duras críticas por su pobre rendimiento en la U, Marcelo Díaz desembarcó en América, primero en México y ahora en Argentina, y no ha sido considerado por Rueda, hasta ahora.
Mientras Eduardo Vargas, artillero de la era Sampaoli en la Selección, no fue llamado por el colombiano para la gira asiática (el DT esgrimió "falta de continuidad en su equipo" para la medida), Jorge Valdivia y Jean Beausejour atraviesan por las postrimerías de sus respectivas carreras.
Pensando en el futuro del combinado nacional, Sulantay dice que "siempre va a haber recambio. Rueda tiene que conocer rápidamente al jugador chileno, nuestra idiosincracia, medios blanditos psicológicamente, pero eso se trabaja igual que la parte física". La Copa América 2019 es el desafío en el horizonte de esta exitosa generación, que no atraviesa por la mejor de sus etapas.
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