Sergio García: “Niemann le pega muy bien y, sobre todo, tiene muy buena cabeza”.

Durante la tarde de ayer, en la previa a la nueva fecha del PGA Tour que se comienza a disputar mañana, Joaquín Niemann y Sergio García participaron de una conferencia de prensa, juntos. Ambos jugadores se encuentran en el mismo grupo, junto al japonés Hideki Matsuyama. El chileno y el español comentaron lo agradable que es compartir entre ellos, y aseguraron que darán todo esta semana.

“Sergio me ayudó mucho desde un principio”, dice Niemann, casi a modo de agradecimiento. Esa reflexión se remonta a sus inicios en el golf grande. El recuerdo más fresco es reciente. Del pasado domingo. El chileno había terminado el green del desempate en el Torneo de Campeones de Hawái y otra vez encontró una voz amiga. “Apenas terminé el green del playoff y salí, estaba esperándome. Ya ha estado en esa posición de ir al desempate y de ganar alguno y de no ganar alguno…”, destaca el chileno.

García le levantó el ánimo. Y Niemann, dice, valoró lo que había alcanzado. “Uno se pone a pensar en que estuvo muy cerca y empieza a ver las cosas malas de lo que fue, pero fue una semana muy buena”, evalúa, finalmente, el nacional. “Fue una semana increíble, jugué bien, pude jugar con él un domingo, que fue muy entretenido. Debo rescatar las cosas buenas de la semana y no solo enfocarme en las cosas malas”, enfatiza el chileno.

García lo elogia. “Desde ya muy pequeño le veía buen potencial a Joaco. Recuerdo cuando nuestro mánager, Carlos Rodríguez, me decía que Niemann le recordaba a una versión joven de mí”, explica. “Le pega muy bien a la bola, patea muy bien y, sobre todo, tiene muy buena cabeza. Lo importante es que siga por esa misma línea. Poco a poco irá consiguiendo las metas que se ponga.”

Mañana a las 12.40 horas, ambos jugadores, además del japonés Hideki Matsuyama, saldrán juntos para iniciar el Sony Open. Niemann dice que la cancha es entretenida. “Es angosta y hay que mover la pelota. Además, debería soplar mucho viento como el año pasado.”

García repara en las dificultades técnicas. Asegura que el campo exigirá pegar muchos golpes diferentes. “Es mucho más rápido que la semana pasada”, agrega. “Es bonito. A mí me gusta jugar con gente con la que me llevo bien, pero eso no quiere decir que le vaya a dejar ganarme. Quiero que él juegue bien, pero yo jugar mejor”, finaliza.