El argentino Juan Martín Del Potro ganó en segunda ronda del Masters 1000 de Miami, la misma en la que volvió a caer el serbio Novak Djokovic, que no termina de encontrarse en la pista.
"Delpo" ganó al holandés Robin Haase (6-4, 5-7 y 6-2) en un partido en el que dio claras señales de agotamiento físico tras ganar los dos últimos torneos en los que ha participado, el ATP 500 de Acapulco (México) y el Masters 1000 de Indian Wells, en el que el número uno del mundo, Roger Federer, le llevó a cinco sets.
El propio tenista de Tandil no tiene problema en reconocerlo abiertamente y tras el partido dijo que lo más importante para él es estar "sano", por lo que si cae eliminado no pasaría "nada" pues tendría ya su "merecido descanso".
Y no lo tendrá fácil en tercera ronda, pues se enfrenta al japonés Kei Nishikori, que hoy superó al australiano John Millman por 7-6 (4), 4-6 y 6-3, y que empieza a tomar la forma perdida tras cinco meses fuera del circuito debido a una lesión en su muñeca derecha.
La cruz de la jornada fue Djokovic, que ante el francés Benoit Paire volvió a dar muestras de que está muy lejos del nivel que le llevó a ganar seis veces en Miami.
La lesión en su codo derecho ha hecho mella en el campeón serbio, que en Miami cayó con claridad (6-3 y 6-4), después de que hace dos semanas le ocurriera lo mismo también en su primer partido en Indian Wells.
Tales son las dudas de Djokovic sobre su juego, que este viernes puso en duda su presencia en el inicio de la temporada de tierra batida, en Montecarlo.
"Lo estoy intentando, pero no está funcionando. Eso es todo. Eso es todo lo que es. No me siento bien cuando juego de esta manera. Por supuesto, quiero poder jugar tan bien como quiera jugar. Simplemente es imposible en este momento", dijo con resignación.