Después de más de dos años y medio fuera de las canchas, Juan Martín del Potro (753°) se propuso volver a jugar en una cancha de tenis. En la víspera, había dejado claro que su regreso huele más a una despedida que a seguir intentándolo. Las múltiples cirugías en la rodilla derecha para intentar volver a la normalidad fueron infructuosas, ya que el dolor persiste y lo limita bastante. Se notó en el encuentro: cayó por 6-1 y 6-3 frente a su amigo y compatriota Federico Delbonis (42°), con quien consiguió la única Copa Davis que su país tiene en las vitrinas.
La primera parada del inicio de su adiós fue el ATP 250 de Buenos Aires. En horario estelar y con diversas personalidades del deporte argentino en las tribunas, como Gabriela Sabatini, Hernán Crespo y Noelle Barrionuevo, Delpo saltó a la pista del Buenos Aires Lawn Tennis bajo una ovación. También su madre lo acompañó por primera vez.
El resultado pasó a segundo plano. Desde un inicio, la escasa movilidad del otrora número tres del mundo se hizo evidente. Si bien comenzó con un quiebre a favor gracias a los numerosos errores de su rival, luego perdió seis juegos consecutivos para ceder rápidamente el primer set.
La segunda manga estuvo más disputada y el ídolo transandino suplió esa falta de movilidad con algunos tiros que evocaron gloriosas tardes del pasado. Así el duelo se emparejó y el publico que repletó el recinto pudo disfrutar un poco más del talento de la Torre de Tandil. Por momentos, se vivió un ambiente copero, que le dio muchísima emotividad a la instancia.
Después de seis puntos de quiebre, Delbonis logró quedarse con el servicio del medallista olímpico en el séptimo juego. En el comienzo del octavo game, Del Potro no pudo contener las lágrimas y estalló en llanto. La imagen también se repitió en la tribuna, donde muchos hinchas se emocionaron. De alguno modo, intuía que podía ser el último juego, lo que finalmente sucedió.
Un emocionante abrazo y un aplauso cerrado al final del encuentro selló el inicio del adiós de Juan Martín del Potro. La luz del ídolo comienza a apagarse.
“Es un momento que no quería que llegue nunca. No era lo que yo quería. La salud me lleva a tener que tomar una decisión poco convencido. Hice demasiado esfuerzo en estos dos años y medio para poder remontar y cumplir otro milagro. A veces puedo perder y no tengo las fuerzas para salir adelante. Siento un poco eso. Lo di todo”, expresó tras el encuentro.
Luego dejó entrever su retiro del tenis. “Hice toda mi carrera con los mejores tenistas de la historia. Estoy orgulloso de haber aprendido de los mejores, tratando de tener los pies sobre la tierra y ser un ejemplo para los chicos. Dentro y afuera de la cancha traté de dejar una marca como dejó Gaby (Gabriela Sabatini), como dejó Manu (Ginóbili) en su deporte. Estoy tranquilo porque seguramente mi último partido fue en la cancha y no en una conferencia de prensa. Lo voy a recordar siempre”, comentó.
“Di todo hasta el último punto. Hoy deseo poder dormir sin dolor en la pierna después de dos años. Es lo que voy a tratar de lograr a partir de mañana. Es muy difícil hacer este deporte con las molestias que tengo. Hoy siento que tengo toda la vida por delante. Quiero vivir en paz”, finalizó.