Cinco años después de Río, este viernes, a las 07.00 de Chile, por fin se realizará la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de Tokio, evento que se desarrollará en condiciones inéditas: sin público y con numerosas medidas sanitarias ante la nueva ola de Covid-19 que afecta a Japón, las que se fueron endureciendo durante las últimas semanas. Sin ir más lejos, las cifras de este jueves fueron las más altas de los últimos seis meses en la capital, con 1.979 casos.
El escenario escogido fue el viejo Estadio Nacional de Tokio, que fue reconstruido para esta nueva edición. El recinto ya había sido utilizado para los Juegos de 1964 y en esta versión también tendrá un protagonismo importante, el que será resaltado con la ya célebre tecnología de ese país, que contempla robots y otros elementos en las tribunas.
La cultura nipona se caracteriza por ser muy moderada, un concepto que se verá reflejado en el acto. “Será una ceremonia mucho más sobria, pero con una hermosa estética japonesa. Muy japonesa y en sincronía con el sentimiento de hoy, la realidad”, señaló a la agencia Reuters Marco Balich, asesor principal del director ejecutivo de la ceremonia, Tayuki Hioki. “No habrá ni humo ni espejos. Muy nipona pero en consonancia con el sentimiento de hoy, con la realidad. Se tratará de cosas reales que suceden hoy”, añadió. Cabe recordar que Kentaro Kobayashi, el director de la ceremonia, fue despedido de su cargo tras la difusión de un video en el que se le ve bromeando sobre el Holocausto.
Tampoco habrá muchos invitados. No se esperan más de 1.000, entre los que destacan el emperador nipón, Naruhito, quien declarará inaugurados los Juegos, pero de acuerdo a reportes locales, evitará pronunciar la palabra “celebración” o “fiesta”, mientras que su esposa, la emperatriz Masako no asistirá. El Comité Organizador y el COI no quieren ocupar conceptos de este tipo, por respeto a las víctimas de la pandemia en Japón y el mundo.
Quienes sí estarán son la primera dama estadounidense, Jill Biden; el presidente de Francia, Emmanuel Macron, y el primer ministro de Mongolia, Luvsannamsrai Oyun-Erdene. De todos modos, hubo otros convidados VIP que decidieron restarse, como el presidente de Toyota, Akio Toyoda, y el consejero delegado de Panasonic, Yuki Kusumi. Ambas marcas optaron por distanciarse de los Juegos por el fuerte rechazo que hay en Japón a su celebración. De hecho, algunas encuestas arrojaron que la mayoría de los japoneses prefería la cancelación por temor a la expansión del coronavirus.
Como la tradición lo indica, será Grecia el primer país en desfilar, mientras que el país anfitrión, Japón, cerrará. Luego, se realizará el Juramento Olímpico y los Juegos se declararán oficialmente inaugurados. Ahí se procederá a encender el pebetero con la antorcha olímpica y el fuego se mantendrá hasta la ceremonia de clausura. En la inauguración se dilucidará dónde será instalado este pebetero. Lo que sí se sabe es que luego será trasladado a la bahía de Tokio para que no contamine, mientras que su fuego será prendido con hidrógeno producido en Namie, una de las ciudades más afectadas por el terremoto y tsunami de 2011 y el posterior desastre de la central nuclear de Fukushima.
La reducida comitiva chilena
El Team Chile, por su parte desfilará, tendrá una comitiva muy reducida, ya que de los 57 deportistas participantes, solo 15 podrán hacerlo, y son quienes ya han ingresado oficialmente a la Villa Olímpica o a una Villa Satélite Oficial y que quieran hacerlo, considerando la cercanía de sus competencias. Otros, como la selección de fútbol femenino, no podrán asistir, ya que se encuentra concentradas lejos de Tokio.
El grupo estará encabezado por los abanderados Francisca Crovetto (tiro skeet) y Marco Grimalt (vóleibol playa) y secundado por los lanzadores de martillo Gabriel Kehr y Humberto Mansilla, los gimnastas Tomás González y Simona Castro; el voleibolista Esteban Grimalt; el nadador Eduardo Cisternas; la equitadora Virginia Yarur; la esgrimista Katina Proestakis; el surfista Manuel Selman; el tenista Tomás Barrios; la tenimesista Paulina Vega; el triatleta Diego Moya; y el tirador con arco Andrés Aguilar. Este último participará tras haber debutado unas horas antes en su competencia.
La representación nacional desfilará en el lugar 112, detrás de Túnez y antes de Tuvalú, pues el listado se realizó siguiendo las normas del alfabeto japonés, por lo habrá que esperar un buen rato para verla.