Este domingo, Pablo Squella saldrá del Ministerio del Deporte, cuando Michelle Bachelet deje la presidencia en manos de Sebastián Piñera. El mandatario, que vivirá su segundo periodo en La Moneda, tendrá a Pauline Kantor como jefa de la cartera. Ante el cambio de mando y los desafíos del nuevo gobierno, algunos de los deportistas más destacados del país evalúan la gestión saliente y proyectan la entrante, esperando mejores resultados y más diálogo, con el fin de mejorar juntos el deporte chileno.
Cáterin Bravo, esgrimista y vicepresidenta de la Agrupación Nacional de Deportistas de Alto Rendimiento de Chile (DAR), explica los inconvenientes que tuvieron con el Ministerio del Deporte: "Habíamos comenzado en el primer gobierno de Piñera a trabajar en políticas deportivas y apoyamos la creación del Mindep. En esa instancia se nos escuchó mucho, pudimos trabajar a la par con el Instituto Nacional del Deporte (IND). Luego, con Bachelet tuvimos muchísimas dificultades. Veníamos con todo el ímpetu, pero nos dimos cuenta que hicieron borrón y cuenta nueva", dice y evalúa con nota 4,0 la gestión saliente, "siendo muy generosa", comenta.
Por su parte, Ignacio Casale, dos veces campeón del Rally Dakar en quads (2014 y 2018), hace la diferencia entre los dos ministros que lideraron el deporte. "El último tiempo, con Squella, la evaluación ha sido bastante buena, porque siento que hizo las cosas bien, que se comprometió con el deporte y quiso cambiar cosas. Cuando estuvo Natalia Riffo, personalmente no me gustó su trabajo", dice el piloto y apunta un 3,8 en la libreta de notas.
La capitana de la selección chilena de hockey césped y también del Team Chile, Camila Caram, comparte la evaluación de los anteriores especifica la razón que le hace poner un 4,0 al trabajo ministerial de Riffo y Squella. "Hubo promesas que no se cumplieron, por ejemplo nuestra cancha, no tenemos una propia, que sea de la Federación o pública. Dependemos de otra gente para entrenar, en horarios incómodos. Si tuviéramos cancha, podríamos hacerlo cuando quisiéramos. Tener una casa donde jugar es lo mínimo", explica la defensora de Las Diablas.
El triatleta Felipe van den Wyngard es lapidario con su análisis, pese a que también evaluó la gestión con un 4,0: "La encuentro baja o mala. Algunas cosas que se me vienen a la mente son la disminución de recursos destinados al alto rendimiento en los últimos dos años. También que había un proyecto millonario para construir un centro de entrenamiento. El Mindep no tuvo un rol trascendente como se pensó, fue más comunicacional que algo para impulsar el deporte".
Thomas Briceño, judoca y uno de los 11 ganadores de le beca Tokio 2020, le puso un 4,0 a la administración saliente por considerarla "bastante neutra", y agrega: "No he visto grandes cambios ni mejoras, tampoco un aumento significante de dinero para decir que se apoyó".
Felipe Aguilar, el mejor golfista chileno de la actualidad, le puso un 5,0 a la gestión de Riffo y Squella, sin dar mayores explicaciones.
Galo Lara, entrenador de la selección sub 17 de básquetbol campeona del Sudamericano de Perú 2017, anotó un 5,5. El coach explicó su decisión: "Me parece bastante buena, porque estuvieron presentes en nuestro logro, con reconocimiento al título conseguido, pero falta concretar el reconocimiento con apoyo directo hacia la generación destacada que tenemos", recalcó.
En cuanto al deporte paralímpico, el nadador Alberto Abarza evaluó con un 5.0, argumentando que "la inauguración del centro de alto rendimiento paralímpico no se ha realizado". Misma nota que apunta la tenista y atleta paralímpica Francisca Mardones: "Se han hecho esfuerzos por mejorar, pese a que este año tuvimos mucha rebaja en el presupuesto", explica.
Francisca Crovetto (por estar fuera de Chile), Daniela Seguel, Hans Podlipnik, Franco Morales, Arley Méndez y María Fernanda Valdés fueron contactados por este medio, pero no quisieron participar en la evaluación que dio 4,5 como promedio a la gestión ministerial saliente.
Los desafíos de Kantor
Ante la disconformidad de los deportistas con el ministerio saliente, los desafíos se trasladan al que encabezará Pauline Kantor desde el domingo.
Desde ya, Ignacio Casale mira con esperanza la nueva gestión administrativa: "En su campaña incluyeron muchos deportistas, siento que están muy comprometidos. Quieren aumentar la cantidad de gente que entrene día a día. El foco está ser un país deportista, es decir, más feliz y positivo".
Felipe van den Wyngard, pone una meta en concreto, relacionado con los Panamericanos de Santiago 2023. "Es un tremendo desafío, Chile y Santiago está muy pobre en cuanto a organización de unos Juegos de esa magnitud, en infraestructura y logística. No me imagino una villa olímpica en santiago, hay que mejorar todo", dice el triatleta.
Galo Lara especifica en la necesidad del básquetbol: "Somos el segundo deporte en Chile, está moviendo mucha gente en el sur y el centro. Nos merecemos financiamiento y el respeto que hemos ganado. Hay que hacer un proyecto a largo plazo para profesionalizar técnicos y jugadores".
Por su parte, Briceño espera un acercamiento con los deportistas. "Pertenezco a la Comisión de Atletas del Comité Olímpico y la idea es agendar reuniones con el gobierno e intentar mejorar aún más el sistema. Intentamos reunirnos con la administración saliente y hacer más cosas, pero quedó estancado. No soy de ningún bando político, pero el primer gobierno de Piñera hizo mayores cosas", concluye.