La jornada sabatina fue una de las más negras para los jugadores de Deportes Iquique. No sólo por la derrota ante San Felipe (0-2), la cual se transforma en la quinta en el Torneo de la Primera B (y suman seis empates y sólo tres victorias), sino también por el feo recibimiento que tuvieron en su regreso a casa.
Lamentablemente, el bus que los trasladaba de retorno al complejo deportivo de la institución, fue atacado por quienes no entienden que la pasión por el fútbol no tiene nada que ver con la violencia. “Varios individuos apedrearon el vehículo donde se trasladaba el plantel, rompiendo vidrios y causando enormes destrozos al medio de transporte”, se puede leer en un comunicado que lanzó la institución nortina.
Luego agrega que “condenamos y repudiamos absolutamente estos hechos de violencia y que expusieron la integridad física de funcionarios, jugadores y cuerpo técnico”, pero no se queda sólo en palabras. Porque en el mismo texto, anuncia que ya habían “logrado identificar a algunos de los involucrados en el incidente” y anunciaron fuertes medidas en contra de ellos.
“El Club Deportes Iquique presentará una querella criminal por los graves hechos y daños ocasionados, en contra de los identificados y a todos quienes resulten responsables, para que se les apliquen las sanciones que corresponden”, fue la medida que adoptaron los Dragones Celeste.
Claro que no fue la única, ya que “también se aplicara el artículo 102 a los identificados en esta lamentable agresión, para prohibir su ingreso a los recintos deportivos donde se disputen los partidos de fútbol profesional”.
¿La razón? ”Deportes Iquique no tolerará estas acciones violentas de algunos inadaptados que solo ensucian a una ciudad y a una hinchada que siempre ha destacado por su fidelidad”. Los Dragones marchan en la undécima posición de la Tabla con 15 unidades, a cinco de la zona de descenso, y su próximo encuentro será de local ante Deportes Copiapó (en fecha y horario a programar).